El rey emérito don Juan Carlos, en el torneo de tenis de Abu Dabi. | Reuters

TW
2

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha negado este miércoles que Patrimonio Nacional esté buscando residencia al rey emérito ante su posible vuelta a España y en todo caso ha pedido respetar su presunción de inocencia sobre sus supuestos negocios irregulares en el extranjero. De esta forma ha respondido, en la sesión de control en el Congreso, a la diputada de la CUP, Mireia Vehí, quien preguntaba a Sánchez sobre la participación del Ejecutivo de coalición en esa operación de regreso a su país de Juan Carlos I desde Emiratos Árabes. Eso sí, para poder preguntar a Sánchez por el emérito, Vehí se ha quejado de que haya tenido que buscar un «subterfugio» en tanto que la Constitución establece que sus actos «no están sujetos a responsabilidad» y que «la responsabilidad de los actos del Rey son de aquellos cargos que lo refrenden: presidentes y ministros». Dicho esto, ha preguntado a Sánchez si está procurando al emérito «una plataforma de aterrizaje» en España después de que el propio presidente venga cuestionando las «conductas incívicas» del que fuera Jefe del Estado durante casi cuatro décadas.

«Debe tener usted más información que yo»

«Debe usted tener más información que yo», ha replicado Sánchez, quien ha negado que su Ejecutivo esté buscando residencia al emérito ante la posibilidad de que pueda regresar de Abu Dabi, donde que fijó su residencia en Abu Dabi en agosto de 2020 después de que la Fiscalía del Supremo abriera una investigación sobre sus presuntos negocios irregulares en el extranjero. A renglón seguido, ha admitido que no le gustan y le «perturban» las informaciones que afectan al rey emérito porque «hacen daño» a la Casa Real, si bien ha llamado a respetar su presunción de inocencia sobre el archivo de unas causas que, según ha recordado, «en España ni tan siquiera están ahora mismo siendo objeto de una investigación», así como la independencia del Poder Judicial. «La democracia española, con todas sus imperfecciones, es una democracia plena y es un Estado social y democrático de Derecho, y eso exige que yo respete la independencia de la Fiscalía General del Estado y del Tribunal Supremo», ha manifestado el jefe del Ejecutivo, quien ha pedido «máximo respeto» a la independencia del Poder Judicial.

«Estamos hablando de personas, no de instituciones»

Y, a continuación, se ha afanado en alejar a Felipe VI de las conductas de su padre. «Aquí no se está juzgando, desde el punto de vista político, a una institución, que es lo que usted pretende con esta pregunta», ha dicho. «En todo caso --ha proseguido--, tendremos que recriminar o no aprobar la conducta de una determinada persona, pero no con la institución». Y es que Sánchez ha justificado que, por esa misma regla, si hubiera una caso de corrupción de algún diputado o diputada del Congreso, eso significaría que todos los políticos son corruptos. «Por tanto, estamos hablando de personas, no de instituciones», ha insistido. El presidente no ha querido acabar sin reconocer «los esfuerzos de transparencia y ejemplaridad del actual Jefe del Estado» y sin subrayar el compromiso de su Gobierno con todas las instituciones constitucionales. «Nosotros sí, a diferencia de otros, cumplimos todos los artículos de la Constitución», ha concluido, en alusión al PP por el bloqueo en la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).