Lo hizo ante los 16 presidentes autonómicos y dos de ciudades autónomas presentes en la reunión celebrada en Salamanca -todos excepto el catalán, Pere Aragonès, que rehusó acudir-, en una reunión de seis horas que contó con la presencia del Rey al inicio de la jornada.
En sus intervenciones, la mayoría de los presidentes autonómicos reclamaron más participación en la toma de decisiones, más herramientas y cobertura jurídica en la lucha contra la pandemia y más implicación en la gestión de los fondos de recuperación, así como un sistema de financiación más equitativo y un replanteamiento de este foro de debate.
El presidente del Gobierno avanzó en la sesión plenaria de la Conferencia, que España recibirá 3,4 millones de dosis adicionales de la vacuna de Pfizer en las próximas semanas, lo que permitirá pasar de 13,1 a 16,5 millones en total en el mes de agosto y anticipar a ese mes el objetivo de tener vacunada con la pauta completa al 70 % de la población española.
Anunció también que las comunidades autónomas recibirán este año 10.500 millones de euros del Plan de Recuperación, lo que supone que van a gestionar el 55,5 % de los 19.036 millones que España va a recibir de la Comisión Europea en 2021 y el 43 % de los 24.197 millones presupuestados este año.
Como cierre, Sánchez reiteró a los presidentes que el Gobierno ofrece «colaboración» y demanda «unidad», sabiendo que esta es una «fortaleza» para España.
Una vez finalizada la reunión los presidentes de las comunidades valoraron la cita. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, exigió a Pedro Sánchez que «deje en paz» a Madrid con su autonomía fiscal y también que se comporte con «lealtad» hacia las comunidades que son «fieles a la unidad de España», al tiempo que criticó, por un lado, los «privilegios» con los que, a su entender, se trata a Catalunya y País Vasco, y, por otro, la idea de estructura federal planteada por algún presidente.
Críticas
El presidente andaluz, Juanma Moreno, siguió la misma línea y avisó a Sánchez de que no permitirá «bajo ningún concepto» privilegios al País Vasco o Catalunya y calificó la Conferencia como «correcta» en las formas pero «decepcionante» en el fondo.
En contra de lo que parecería por algunas declaraciones, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, dijo que la reunión ha ido «bastante mejor que el ruido ambiental de los últimos días hacía prever».
Entre los presidentes autonómicos, el lehendakari, Iñigo Urkullu, criticó algunas decisiones «prematuras» en la gestión de la pandemia por parte del Gobierno y volvió a pedir «cobertura jurídica» para que las comunidades puedan imponer restricciones como el toque de queda.
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, reclamó al Gobierno «unidad» para afrontar la crisis sanitaria y la reactivación económica.
El anfitrión de la cita, el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, pidió «concreción» al Gobierno en su estrategia nacional por el reto demográfico.
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Sanchez no reparte nada. Lo pagaremos todos menos el. Y con intereses. Es decir, prepararos a impuestos, multas, y a pagar por absolutamente todo. Es su manera de tenernos sumisos