Aguirre: «Me imputan constantemente, pero por corrupción no me van a imputar»

Aguirre ha comparecido este lunes ante la prensa después de reunirse con el grupo del PP en la ciudad, tras anunciar ayer que abandonaba la presidencia del PP de Madrid por «responsabilidad política», días después de los registros en la sede ordenados por el juez del caso Púnica para buscar pruebas de una posible financiación ilegal.

«Me imputan constantemente, he estado imputada por decir que los de Podemos eran castristas (...) Por corrupción es por lo que no me van a imputar», ha asegurado en respuesta a los periodistas.

«Estoy todos los días en los tribunales, no tengo fuero, fíjese si soy presa fácil para los jueces», ha apostillado.

En la rueda de prensa, ha recalcado que no va a dimitir como responsable del grupo municipal y que cumplirá su «compromiso» de acabar la legislatura como edil, tras reclamarle hoy los grupos de Ahora Madrid y PSOE su salida del Ayuntamiento, aunque no sabe que hará a continuación.

«Ya tendré a lo mejor edad de jubilarme, pero como no me pienso jubilar...», ha señalado.

En este sentido, la expresidenta del PP de Madrid ha insistido en que su dimisión al frente del partido «nada tiene que ver» con su condición de concejal.

«Yo no soy como esos ministros que estuvieron aquí cinco minutos y se fueron, yo he adquirido un compromiso y voy a estar aquí los próximos 4 años, no hay ninguna razón para dejar este escaño», ha zanjado.

Sobre su anterior dimisión como presidenta de la Comunidad de Madrid, ha recordado que en ese momento dijo que se retiraría de la primera línea de la política, y considera que «ser concejal de la oposición ya no es primera línea».

Aguirre ha rehusado plantear más dimisiones en el partido tras su renuncia a la presidencia del PP de Madrid: «No estoy para juzgar a nadie y mucho menos para aconsejar a nadie, no aconsejo», ha sostenido.

En concreto, preguntada sobre el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha negado querer enseñarle el camino con su renuncia.

«De ninguna de las maneras, bastante tengo yo con enseñarme el camino a mí misma», ha dicho.

Por otro lado, ha comentado que lleva «muchos años» en el PP y también hace ya «muchos años» que dejó de ser «la niña de los ojos del PP nacional», desde el Congreso nacional del partido celebrado en 2008 en Valencia.

«Yo ni pedí un aval ni dije que me iba a presentar en ningún momento y comencé a ser ya la mala de la película», ha declarado.

La expresidenta del PP de Madrid ha defendido su gestión política en este cargo (-"hemos ganado en lugares donde jamás habíamos gobernado"-), aunque ha hecho autocrítica respecto a los asuntos económicos.

«Jamás me he ocupado de las cuestiones económicas, he hecho mal y jamás he tenido suficiente celo vigilando las cuentas», ha confesado.

Aguirre ha descartado que su comparecencia en la comisión de corrupción de la Asamblea de Madrid el pasado viernes haya influido en su decisión de dimitir, pero sí el hecho de que nombrara como secretario general del PP de Madrid a Francisco Granados, actualmente en prisión por su imputación en el caso Púnica.

«Estuve meditando todo el sábado y decidí que lo mejor que podía hacer por el bien de todos es dimitir», ha contado.

Preguntada por los motivos por los que el PP parece estar «desangrándose poco a poco», ha dicho que es algo que «le está pasando a todos» los partidos, y ha citado al PSOE, CIU y Podemos.

«Yo creo que la solución es que la justicia española, que es independiente y es rigurosa, tiene que ser más rápida. Los ciudadanos no pueden tener la sensación de que la justicia por su lentitud deja impunes a los corruptos», ha apuntado.

Aguirre se ha mostrado dispuesta a colaborar «con todo el mundo», ya que asegura que es la «principal interesada» en aclarar los hechos, aunque cree que el «grado de indignación» de la gente es distinto «cuando alguien roba para sí mismo que cuando alguien lleva fondos al partido».

Sobre el futuro del PP de Madrid, ha dicho que no sabe qué hará el partido a nivel nacional, pero ha pedido que acabe pronto la situación de «interinidad».