Su estado de salud era «grave» desde su llegada a España ya que presentaba una «importante deshidratación» y una afectación hepato-renal. Además, en las últimas horas había sufrido un «empeoramiento» como consecuencia de su «delicado estado de salud».
El religioso, de 69 años, trabajaba como director médico del Hospital San Juan de Dios en la ciudad de Lunsar y pertenecía desde hacía 52 años a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD). Asimismo, había dedicado los últimos 30 años de su vida a trabajar en Africa.
Tras confirmarse que se había infectado con el virus del ébola, García Viejo manifestó su deseo de ser trasladado a España y se iniciaron los trámites para su repatriación, que se produjo en la madrugada del pasado lunes.
A su ingreso, se procedió a su motorización y se le ha realizó una extracción de sangre para el estudio de hemograma, bioquímica y coagulación. Desde entonces tratamiento «de soporte», es decir, centrado en el control de los síntomas, al no haber un tratamiento específico para combatir el virus.
Una de las terapias experimentales que se han desarrollado en los últimos meses, el 'Zmapp', con el que se trató al religioso Miguel Pajares, también repatriado a España, se encontraba agotada en todo el mundo, por lo que se estaban barajando otras alternativas terapéuticas para poder tratarlo.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.