El lehendakari, Patxi López, pidió ayer a la izquierda abertzale que reconozca el daño causado a las víctimas por haber "apoyado, justificado y consentido" la violencia de ETA.
El lehendakari recibió ayer tarde en la sede de la Presidencia vasca a una delegación de la coalición Bildu integrada por Rufi Etxeberria, en representación de la izquierda abertzale, Pello Urizar, secretario general de EA, y Oskar Matute, de Alternatiba.
La reunión se produjo en el marco de la ronda de contactos del lehendakari con partidos políticos y agentes sociales para analizar el nuevo tiempo político tras el cese definitivo de la violencia de ETA.
El saludo entre el lehendakari y Etxeberria generó una gran expectación mediática y la rueda de prensa posterior al encuentro fue una de las más multitudinarias de las celebradas hasta ayer.
En una comparecencia ante los medios, Etxeberria reconoció la importancia del encuentro con el lehendakari de cara a ir normalizando relaciones entre partidos e instituciones y planteó la necesidad de que se impulse un foro extraparlamentario para ir buscando soluciones al conflicto.
También pidió al lehendakari que abra una dinámica bilateral con la presidenta del gobierno navarro, Yolanda Barcina, para que ambos parlamentos se impliquen en esa tarea, para lo cual, recordó que es necesario que la izquierda abertzale recupere su representación en ambas cámaras.
Adeás, Etxeberria y los otros dos representantes de Bildu hicieron un llamamiento a los gobiernos español y francés para que establezcan "sin mayor dilación" un cauce de diálogo con ETA con el fin de abordar las consecuencias del "conflicto político".
En un comunicado, el lehendakari criticó el apremio de Bildu para que las instituciones democráticas respondan con urgencia al anunciado fin del terrorismo y ha dicho a Bildu que "las urgencias no pueden marcar el tiempo de la libertad".
En este sentido, trasladóa la coalición que irá adoptando en cada momento las acciones que considere oportunas para afianzar la libertad y la convivencia en la sociedad vasca.
Asimismo, recordó a la izquierda abertzale que tiene contraída "una gran deuda con la sociedad vasca por haber consentido en el pasado la violencia terrorista" y le ha pedido que reconozca el daño causado a las víctimas, también desde las instituciones en las que gobierna. En cuanto a la mesa de partidos, se negó a impulsar foros extraparlamentarios porque, a su juicio, "son las instituciones democráticas los lugares apropiados para presentar y discutir las diferentes opciones de los partidos políticos".
Con respecto a la cuestión de los presos, López recordó que ha sido ETA la que ha impedido a sus presos cualquier iniciativa tendente a la reinserción y ha confiado en que en este nuevo tiempo sea posible una política penitenciaria "más abierta y más libre para todos los afectados".
Por la mañana, el lehendakari recibió al secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, quien ha pedido a los gobiernos de España y Francia que den pasos "ya" hacia la normalización.
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