Imagen de archivo de combates en Ucrania. | STRINGER

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La batalla por Bajmut aún no ha terminado. Después de que los mercenarios de Wagner izaran la bandera rusa en la ciudad, Ucrania asegura que aún controla un pequeño sector en el suroeste, mientras continúan los combates en los flancos. «Nuestras tropas en Bajmut controlan algunas infraestructuras y la zona de viviendas del área de Litak (suroeste). Los combates continúan», dijo Hanna Malyar, viceministra de Defensa ucraniana, en su canal de Telegram.

Mientras, la televisión pública rusa comparó la conquista del bastión ucraniano con la toma de Berlín en 1945 por el Ejército soviético y arengó a las tropas rusas a seguir avanzando en el Donbás, optimismo que no comparten los blogueros militares rusos, conscientes de que se trata de una victoria simbólica, pero pírrica, dado el alto coste de casi diez meses de combates.

Ucrania no tira la toalla

Si hubo cierta confusión en las primeras horas, Kiev ahora tiene claro el mensaje. Por una parte, la batalla aún no ha terminado, ya que las tropas ucranianas controlan varios edificios industriales y de viviendas, además de infraestructuras en el suroeste de la ciudad de la región de Donetsk. Por otra, Malyar subrayó que «la defensa de Bajmut como ciudad cumplió completamente su misión», ya que el potencial ofensivo ruso «se ha reducido de forma significativa» debido a las «grandes pérdidas» sufridas.

El suroeste de la ciudad está conectado con las dos principales carreteras que llevan a Bajmut, vías por donde Kiev podría tanto enviar refuerzos como evacuar a los últimos defensores de la urbe. A su vez, la viceministra de Defensa destacó que los combates por las zonas de más altura en los flancos de Bajmut, que otorgan una posición de fuego ventajosa a quien las controle, continúan en los suburbios del norte y el sur de la ciudad. «Nuestros combatientes no le dan al enemigo la oportunidad de ganar posiciones allí. El enemigo está desplegando fuerzas y equipamiento adicionales», resaltó. Según el Instituto sobre el Estudio de la Guerra (ISW, según sus siglas en inglés), el Ejército ruso necesitará refuerzos para sostener los flancos, algo que ya estaría haciendo, según Malyar.

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Wagner abandona el frente

Tras lograr el objetivo militar marcado en rojo desde mediados de 2022, el jefe de Wagner, Yevgueni Prigozhin, aseguró hoy que sus unidades se retirarán de Bajmut antes del 1 de junio. «En los límites occidentales (de la ciudad) se han creado posiciones defensivas, por lo cual el Grupo Wagner desde el 25 de mayo hasta el 1 de junio abandonará Artiómovsk (nombre ruso de Bajmut)», dijo en su canal de Telegram. Prigozhin añadió que «si el Ministerio de Defensa no cuenta con suficientes efectivos (para defender Bajmut), hay miles de generales, se puede conformar un regimiento de generales, darles a cada uno un fusil y todo estará bien».

El jefe de Wagner confirmó las declaraciones de Denís Pushilin, líder interino de la autoproclamada república popular de Donetsk, anexionada por Rusia, sobre el inicio de las labores de desminado en la ciudad. Según el ISW, Wagner ha agotado sus recursos y su capacidad para lanzar una ofensiva contra los bastiones ucranianos de Kramatorsk y Sloviansk, situados en el mismo corazón del Donbás, opinión compartida por blogueros rusos.

Incursiones en la frontera rusa

Las tensiones también se dispararon en la frontera. Según el gobernador de la región de Bélgorod, Viacheslav Gladkov, «un grupo de saboteadores de las Fuerzas Armadas ucranianas» se adentró en territorio ruso. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, desveló que el presidente ruso, Vladímir Putin, fue informado de dicha incursión. «Entendemos perfectamente que el objetivo de estas acciones de sabotaje es distraer la atención del frente de Bajmut y minimizar el efecto político de la pérdida de Artiómovsk (nombre ruso de Bajmut) por parte ucraniana», declaró Peskov en rueda de prensa. Un representante del Directorio de Inteligencia Militar de Ucrania dijo a la prensa que detrás de esos ataques están dos grupos de voluntarios rusos que combaten contra el Kremlin: el Cuerpo de Voluntarios Rusos y Legión Libertad para Rusia.

El objetivo principal de esas incursiones sería crear una «zona de seguridad» que proteja a los civiles ucranianos de los bombardeos rusos. «Ucrania sigue con interés los acontecimientos en la región rusa de Bélgorod y estudia una situación con la que no tenemos relación directa. Como es sabido, los tanques se venden en cualquier mercado militar ruso. Al fin y al cabo, las unidades de partisanos están integradas por ciudadanos rusos», comentó Mijailo Podolyak, asesor presidencial ucraniano, en Twitter.