El llanto de un abuelo por su nieto desaparecido bajo los escombros

El impacto de un misil ruso Kh-22 causó al menos la muerte de seis niños, según los recuentos oficiales de las autoridades ucranianas que elevan el número oficial de fallecidos hasta los 45. Este pasado lunes la ONU condenó la ofensiva en zona residencial, y solicitó que se esclarezca si el ataque constituye un posible crimen de guerra, al golpear con armamento pesado una zona con población civil.

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En base a las informaciones de la administración militar de la región central de Dnipropetrovsk, Ucrania ha suspendido este martes las operaciones de búsqueda y rescate de entre los escombros que quedan tras el bombardeo de un edificio residencial en la ciudad de Dnipró, la cuarta capital del país antes de la invasión decretada por Vladímir Putin el pasado 24 de febrero.

Asimismo, fuentes de la Policía ucraniana han informado que quince de las 44 víctimas mortales del misil ruso Kh-22 en Dnipró aún no han sido identificadas, mientras otras veinte personas están desaparecidas. En total cinco niños han quedado huérfanos tras la explosión, y tres de ellos están bajo la tutela de familiares y otros dos del Estado, al no tener familiares vivos que se hagan cargo de ellos.