Al parecer, la mujer llamó por teléfono el martes por la noche al servicio de aduanas suizo alertando de una persona con una bomba en el sector francés del aeropuerto, lo que llevó al Ministerio Público, la Policía de Ginebra y a las autoridades francesas a actuar, ha indicado en una nota la fiscalía.
En el marco de la investigación, se ha conseguido identificar el número desde el que se había realizado la llamada, en Annency, en la región de Alta Saboya. En virtud de una comisión rogatoria del Ministerio Público, las autoridades francesas han registrado el domicilio, donde una mujer ha confesado haber realizado la llamada para evitar la marcha de su marido.
Según informa el diario 'Tribune de Genève', ya se ha abierto un procedimiento penal contra la mujer en Francia y las autoridades judiciales de los dos países están coordinando la continuación del proceso.
Entretanto, se ha ordenado levantar las medidas adicionales de seguridad que se habían adoptado desde primera hora de la mañana en el aeropuerto. «El aeropuerto vuelve a la situación anterior, es decir, una presencia policial reforzada en la plataforma aeroportuaria en relación con la situación internacional», ha indicado la Policía cantonal.
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