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Dos civiles murieron por un bombardeo de artillería en una localidad de la región de Lugansk una media hora después de haber entrado en vigor el alto el fuego en el este de Ucrania, informó Guenadi Moscal, jefe de la administración regional fiel a Kiev.

Señaló que a las 00.20 hora local una casa fue alcanzada por disparos de lanzaderas Grad y añadió que «por desgracia, bajo los escombros fallecieron un hombre de 87 años y una mujer de 69».

La población atacada es Popasnoe, en la región de Lugansk, pero aledaña a la conflictiva zona de Debáltsevo, en la vecina Donetsk, donde se concentra principalmente el conflicto entre fuerzas ucranianas y prorrusas en las últimas semanas.

De acuerdo a la fuente, el fuego de artillería continúa esta mañana en esa zona.

«Según la situación a las 09.30 de hoy (07.30 gmt) se siguen escuchando cañonazos en la zona de Popaskoe, donde al parecer se están registrando hostilidades», agregó.

El responsable del Ministerio de Defensa de la autoproclamada república popular de Donetsk, Eduard Basurin, informó por su parte de que en las zonas controladas por las milicias en esa región se observa en términos generales la tregua, excepto junto a Debáltsevo.

«En general se observa la tregua, aunque en Debáltsevo hay disparos de artillería contra nuestras posiciones. También se dispara contra Uglegorsk», dijo, para añadir que en el resto de las zonas rebeldes la situación es «tranquila».

Poco antes, el portavoz del mando militar ucraniano, Vladislav Selezniov, informó en conferencia de prensa que en las primeras horas del alto el fuego hubo incidentes aislados, pero que más tarde cesaron los combates.

«Desde las 00.00 horas (22.00 gmt del sábado, cuando entró en vigor la tregua), en la zona de la campaña militar, en general se respeta el régimen de alto el fuego, hay disparos localizados, no de forma sistemática», señaló.

«Desde las 03.00 no ha habido ningún tipo de disparos», agregó el portavoz.

El acuerdo del cese de las hostilidades fue alcanzado el jueves pasado en la cumbre celebrada en Minsk por los presidentes de Ucrania, Petró Poroshenko; Rusia, Vladímir Putin; Francia, Francois Hollande, y la canciller federal alemana, Angela Merkel.

«Quiero la paz y yo, comandante supremo, ordeno a las Fuerzas Armadas de Ucrania, a la unidades de la Guardia Nacional, del Ministerio de la Interior y el Servicio de Seguridad cesar el fuego a las 00.15 hora del 15 de febrero», dijo Poroshenko en una comparecencia en directo por televisión al filo de la medianoche de ayer.

El alto el fuego es el primero de los trece puntos del plan de arreglo al conflicto en las regiones orientales ucranianas de Donetsk y Lugansk, que desde que desde su estallido, en abril del año pasado, se ha cobrado unos 6.000 muertos, entre combatientes y civiles.