En la oficina de Correos en Fornells, un elector abre el sobre con la documentación, mientras otra hace cola | Katerina Pu

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Las elecciones generales que se celebran el próximo domingo 23 están trayendo de cabeza a más de uno. Tanto la ciudadanía como el personal de Correos están atendiendo a una situación insólita hasta la fecha. En total, se han registrado 2.622.808 solicitudes de voto por correo a nivel nacional, de las cuales 36.401 se han realizado en Balears, según datos de Correos.

El hecho de que estos comicios se celebren en pleno verano ha propiciado que se batan todos los récords anteriores: un incremento del 94,7 por ciento en el voto por correo a nivel nacional respecto a las últimas elecciones de 2019. En el caso de Balears, el aumento ha sido del 24 por ciento.

Falta de previsión

La delegada de UGT en Correos en Menorca, Luisa Costa,    denuncia que ha habido una clara falta de «material» y de «contrataciones». «Estamos en una isla turística. A partir de mayo, la gente empieza a buscar alojamiento para pasar la temporada aquí. En el caso de Correos, si solo se hacen contratos de un mes, la gente va a buscar un puesto de trabajo en otro lugar, no en Menorca», denuncia la delegada.

Fornells: a votar en plenas fiestas

Este fin de semana se celebran las fiestas de Sant Antoni en Fornells, motivo por el cual muchos vecinos han decidido acudir a la oficina de Correos en vez de acercarse el domingo hasta el colegio electoral. De esta manera adelantan la emisión de su voto y se ahorran dolores de cabeza en la jornada festiva del domingo.

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La oficina de Correos del núcleo urbano amplió hace pocos días su horario, pasando a ser de las 9.30 hasta las 14 horas. El horario habitual de 13:30 a 14 horas se quedaba «más que corto», explica el responsable de la oficina, Miquel Espinet. «Esta es una oficina auxiliar que tenemos abierta todo el año tan solo media hora. Nosotros empezamos a hacer las solicitudes de voto cuando la oficina tenía este horario, por lo que se creaban grandes colas y nos llegaban quejas totalmente lógicas y normales por parte de los clientes» detalla Espinet.

Atendiendo a las peticiones    de los ciudadanos y a la queja formal del alcalde des Mercadal, Joan    Palliser, Correos decidió rectificar su horario para ofrecer el derecho a voto a todo aquel que lo solicitase.

«El miércoles fue el día que más gente hubo. Fue espectacular, la verdad», recuerda el funcionario, añadiendo que las colas se vienen repitiendo «desde el sábado».

Este jueves, la jornada ya se presumía mucho más tranquila. En general, la población de Fornells ha sido «muy previsora»: «Todos los votantes se han acercado en el plazo que le correspondía, salvo aquella gente a la que le ha llegado el voto por correo a última hora», concluye.

El apunte

«Ir a votar en julio se hace difícil pero tienes que seguir tus principios»

Muchos trabajadores de otras provincias aprovechan la oportunidad de votar por correo. Es el caso de Miguel Nieto en Fornells: «Estamos de fiesta este fin de semana. Si trabajas fuera de Fornells y tienes que volver con el coche… se hace totalmente imposible», expresa el joven.

En su familia, su madre se encuentra en la misma situación al trabajar en Ciutadella, por lo que acercarse desde el trabajo a Fornells en plenas fiestas para tan solo votar se presume una tarea harto difícil.

«Bastantes» allegados de Miguel también han optado por el voto por correo. Y es que él tiene la esperanza de que, pese a las dificultades, todo el mundo se anime a votar: «Ir a votar un 23 de julio se hace difícil, pero tienes que seguir tus principios y elegir lo que quieres para tu país», declara