La esposa ha decidido adoptar el apellido Djokovic, según asegura el diario montenegrino «Vijesti» en su edición digital. Por su parte, el rotativo serbio «Blic» escribe que la ceremonia nupcial comenzó a las 18.00 hora local (16.00 GMT) y terminó en media hora, sin que la lluvia y los truenos aguaran la fiesta.
La ceremonia tuvo lugar en un elegante cenador de mármol instalado al lado de un parque cerca de la llamada «Playa de la Reina». La fiesta seguirá en la propia playa, en terrazas cubiertas y rodeadas de cortinas blancas, según explica la prensa local.
La boda se ha celebrado en un ambiente de intimidad, sin publicidad ni cámaras, según el deseo explícito de la pareja, y entre grandes medidas de seguridad.
Incluso se mantiene en secreto la lista de 140 invitados, aunque la prensa especula que entre ellos están los entrenadores de Djokovic, Boris Becker y Marian Vajda, y los tenistas Janko Tipsarevic, Viktor Troicki, entre otros.
La boda eclesiástica, ya con menos invitados, se celebrará el próximo sábado
La celebración de la «boda del siglo» empezó ya anoche con una recepción en la ciudad-hotel Sveti Stefan, una diminuta península elitista en la costa adriática de Montenegro.
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