TW

Pues allí viene. Resulta que sí, que los pronósticos fatalíticos que vienen avisando en Hollywood, se van a cumplir.

Un asteroide de 50 metros se acerca hacia la Tierra y, comentan, existen un 2,3% de posibilidades de que impacte contra nosotros el 22 de diciembre de 2032. Bueno, con un poco de suerte ese día si no nos toca El Gordo celebraremos con más ganas lo de tener salud. Y vida.

No será grande el Universo que tenemos que ir a cruzarnos, dentro de unos años, con un trozo de piedra encabronada que lleva vete tú a saber cuánto tiempo pululando por el Espacio y que amenaza con mandarnos a tomar por saco apocalípticamente.

Pero bueno, lo que me tranquiliza es que en el fondo nos da bastante igual. Quiero decir, nos preocupa más que la batería del teléfono nos aguante lo que queda de día que no andar pensando que ojalá el astrofísico con diecisiete másteres, tres doctorados y doce carreras, todo con matrícula de honor, que ha hecho los cálculos de la trayectoria del asteroide haya sumado con los dedos y el resultado esté mal o que, se haya olvidado en algún paso de la operación de que llevaba una, y que el asteroide en realidad siga un rumbo hacia la nada que no tenga tan funestas consecuencias.

Noticias relacionadas

A ver, que yo no he estudiado mucho en mi vida, lo justo para llegar hasta donde estoy y haciendo alguna chuleta, pero tengo la impresión de que a la salud del planeta y a la nuestra como sus inquilinos, no nos va a sentar demasiado bien si el pedazo de roca choca contra nosotros. Aunque, dicen los que saben, que no pasará nada, «arrasará una extensión similar a la que ocupa la isla de Gran Canaria», siempre que no caiga sobre ningún núcleo urbano.

¿Sabes qué? Ahora mismo, mientras te lees estas líneas que, a lo mejor te están amargando todavía más el café, las probabilidades de que el asteroide choque contra la Tierra son mayores al 0,001% que son las probabilidades que tienes de que te toque El Gordo de Navidad. También tienes más probabilidades de que choque el asteroide a que te alcance un rayo que te achicharre.

La parte buena es que, si realmente el 22 de diciembre cae el asteroide, después del sorteo de Navidad, algunos de los ganadores tendrán un buen agujero que tapar. O ellos serán el agujero que tapar.

dgelabertpetrus@gmail.com