12/06/24 4:00
Soñé que el portacontenedores Europa se hundía. Yo me encontraba en la costa, arriba de un acantilado. El graznido de las gaviotas impedía que llegaran hasta mí los gritos de la tripulación. La estampa era inquietante. El mastodonte acuático se hundía con esa lentitud propia de la aguja de los minutos. Si fijaba la vista en el buque, no parecía que nada raro sucediera; en cambio, si cerraba los ojos y los abría unos segundos después, el portacontenedores se encontraba un poco más hundido.