"Poblet menudet"

Poblet menudet és Llucmaçanes". Sus habitantes conocen sus limitaciones, que saben transformar en virtudes, y las difunden en su himno. Saben que son poca cosa en el mapa mundial de Menorca, que uno detrás del otro apenas cubren el dique de Son Blanc y que caben en los pupitres de un colegio de una línea. Hacía tiempo que pedían un autobús y en sus últimos coletazos el anterior equipo de gobierno del Consell se lo concedió, para mayor gozo de aquellos que, por lo que sea, no pueden hacer frente a las curvas del Camí de Baix volante en mano. Ahora ven peligrar el servicio porque los nuevos mandatarios, acuciados por las deudas, intentan reconducir todo aquello que la calculadora no tolera. Y la calculadora es fría, no entiende de inversiones sociales a medio o largo plazo. La implantación del transporte público por carretera lleva años de retraso pero avanza. Hace no mucho conformaba una red muy precaria, en estos momentos es ostensiblemente mejor, con importantes incrementos de usuarios y, lo que resulta más atractivo, con las bases puestas para ir cambiando hábitos, ser cada vez más sostenibles y que al mismo tiempo la calculadora acabe viendo con buenos ojos lo que ahora no tolera. La red de transporte es una y su revisión debe respetar el conjunto, siempre con las luces largas puestas, lo que implica no menospreciar los "pobles menudets" que el corto plazo de la calculadora no tolera.