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"En Turquía no se mueve una piedra sin contar con el sector turístico". Esta frase no pertenece a ningún representante del turismo turco, no; fue pronunciada por el presidente de ASHOME, el señor Joan Melis, el pasado jueves en el marco del Turisfòrum, el foro sobre turismo que el Partido Popular de Baleares organizó en Menorca para recoger las opiniones de los profesionales y de la ciudadanía en general sobre las necesidades y oportunidades del sector turístico.

En dicho foro pude comprobar cómo el sentir mayoritario de los profesionales consultados coincide plenamente con el del Partido Popular sobre el mundo del turismo. El citado representante de los hoteleros menorquines lo pudo decir más alto pero no más claro: "Necesitamos liderazgo político a nivel turístico, sin intervencionismos y sin burocracia" y "se nos pide que hagamos un esfuerzo, pero luego no nos consultan", fueron algunas de sus manifestaciones textuales.

En el transcurso del foro se puso el dedo sobre la llaga: los actuales gobernantes del equipo de gobierno del Consell Insular de Menorca del PSOE y PSM-Verds han reinventado el despotismo ilustrado, adaptándolo a los nuevos tiempos: todo por el sector turístico, pero sin el sector turístico.

¡Cuántas veces desde el Partido Popular hemos reclamado antes a Joana Barceló y ahora al actual presidente del Consell, el señor Marc Pons, que reduzcan la macroestructura política, que apliquen austeridad, que dejen entrar al sector turístico en la Fundació Destí Menorca, que simplifiquen la burocracia!… un conjunto de actuaciones que podría llevar a cabo la Administración insular para, así sí, ayudar al restablecimiento de la economía.

Nuestros gobernantes pueden ayudar a la economía. ¿Cómo? Muy fácil: no poniendo más obstáculos de los que ya tienen los empresarios para que puedan mantener sus empresas o crear nuevas para dar trabajo a la gente. Ello sólo como primer paso, ya que el objetivo principal del Partido Popular, el objetivo de los emprendedores, de los empresarios, de aquellas personas, asociaciones e instituciones que quieren que Menorca vuelva a ser una tierra de oportunidades, es el de devolver el protagonismo a la sociedad civil.

Precisamente, otro de los ponentes de este foro, el ex presidente del Instituto Tecnológico Hotelero y también de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos, el también menorquín José Guillermo Díaz Montañés, hizo hincapié en la importancia de la formación para conseguir este objetivo. "Si tuviéramos gente bien formada no estaríamos aquí", aseguró.

También desde el Partido Popular defendemos la importancia de la ecuación y la formación. Sin embargo, el actual Govern balear del presidente Francesc Antich, el autodenominado Govern progressista, es el mismo que ha aplicado la tijera a las plantillas de profesores de nuestros hijos. Y no lo dice sólo el Partido Popular; son los propios sindicatos los que han puesto el grito en el cielo por esta cuestión.

Eso sí, este Govern como el Gobierno central de Zapatero son los mismos que siempre han dicho que la crisis –después de haberla negado durante dos años- no les conducirá a llevar a cabo recortes sociales…

Por su parte, el representante de Camper & Nicholson Internacional para el Mediterráneo, Jonathan Syrett –empresa enfocada a la venta de grandes yates- informó a los asistentes a este acto que el gasto medio del turista de grandes yates en tierra a diario alcanza los 500 euros; cifra nada despreciable, teniendo en cuenta las dificultades que actualmente tiene el sector servicios en Menorca.

En definitiva, el sector turístico y el Partido Popular coinciden en sus postulados; hablamos, por tanto, el mismo idioma. ¿Nos entiende usted, señor Pons?...