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El Consell Escolar de Balears instó ayer al Govern a aumentar la inversión educativa hasta el cinco por cien del Producto Interior Bruto regional y reducir la tasa de abandono escolar temprano, una de las más elevadas del país y lejos de los objetivos europeos. Los datos de 2024 concluyen que en el archipiélago un 19,1 por cien de los jóvenes solo tiene la educación básica obligatoria, mientras que en el resto de España la tasa es del 13 por cien. Son algunas de las conclusiones del «Informe del Sistema Educativo de Balears». Advierte que el estrés, la sobrecarga laboral y la falta de recursos agudizan las bajas de los docentes.

El Govern afronta enormes retos al gestionar las competencias en Educación, que abarcan desde la mejora de las infraestructuras educativas a la digitalización en las aulas. Ha de atender muchos frentes en un sector muy reivindicativo. Mientras Balears empeora en abandono escolar temprano, en el resto del país se reduce.  La raíz del problema la hallamos en el modelo económico de las Islas, basado en el turismo, con empleos y retribuciones que deslumbran a los jóvenes. Una generación que renuncia a la formación a cambio del sueldo.