El presidente del Consell de Menorca, Adolfo Vilafranca, pide al Ministerio de Transportes que la prueba piloto de la OSP con Barcelona beneficie, prioritariamente, a los residentes. Según la propuesta entregada por el secretario general de Transportes, Benito Núñez, se prevé una tarifa máxima de 170 euros, que quedaría en 42,50 con la aplicación del descuento de residente.
La institución insular expresa sus recelos ante los efectos colaterales de una iniciativa que es defendida con ahínco por el PSOE. La portavoz socialista Susana Mora afirma que suprimirá el tramo de billetes con los precios más elevados. Desde el gobierno del Consell insisten en que no provoque una reducción de la conectividad o acabe provocando un aumento generalizado en el precio de los billetes.
En este escenario, resuenan las declaraciones que en marzo pasado efectuó el delegado de Aviba en Menorca, Xavier Pons Cladera, quien afirmó que «la OSP con Barcelona sería perjudicial para los menorquines en general, y en el momento en que se establezca un precio máximo es muy probable que los precios bajos desaparezcan». Antes de poner en marcha este proyecto, en 2025, hay que aclarar y resolver todas las dudas.