26/01/20 0:00
El encuentro de las casas baleares en el extranjero, que tiene lugar en Palma y al que ayer asistió la presidenta del Govern, Francina Armengol, ha servido para plantear dos cuestiones nucleares sobre la situación actual que atraviesan estas instituciones -algunas de ellas con una larga trayectoria de servicio a nuestros ancestros en sus respectivos países-. En primer lugar figura el de su susbsistencia económica y, por otra parte, el peligro que supone que sus funciones queden desdibujadas a medida que el tiempo diluye el vínculo de sus socios con las Islas.