La última avería del cable submarino con Mallorca, que inutilizó esta conexión, dejó Menorca aislada energéticamente, al depender en exclusiva de la central térmica de Maó. En esta situación de precariedad se registró, en octubre pasado, un gran apagón que afectó durante 56 horas a 38.000 usuarios menorquines. De ahí la extrema necesidad para reponer este enlace vital, cuya puesta en marcha anuncia Red Eléctrica de España se producirá el primer semestre del próximo año.
El plan de inversiones de REE para 2021-2026 prevé instalar un segundo enlace submarino entre la Península y Mallorca. Su entrada en funcionamiento permitirá atender más del 50 por ciento de la demanda de energía eléctrica en Balears. En invierno, cuando se reduce el consumo, esta interconexión cubriría prácticamente toda la demanda del archipiélago. Red Eléctrica aspira a que en 2030 las Balears estén conectadas con la Península y entre sí con dos cables para cada tramo, al prever nuevos enlaces Mallorca-Eivissa y Mallorca-Menorca. Importantes anuncios y compromisos. Cabe exigir a la empresa que hoy preside el exministro Jordi Sevilla la máxima celeridad para agilizar la ejecución de todas estas inversiones.