Cartas de los lectores

Como mediterráneos, supongo que esperamos que resuelvan nuestros problemas el presidente, el rey, el emperador o los senadores de turno. Pero señores, ¡no lo harán! A la hora de la verdad se preocupan por salvar sus muebles, los de su partido y a eludir responsabilidades políticas a base de la negación de las evidencias. Un político que elude sus responsabilidades es un político corrupto! Y eso no se puede permitir. Todos deberían pagar por sus irresponsabilidades de forma directa, sin rodeos legales ni estrategias abogadas. Con cárcel si es necesario y devolviendo hasta el último céntimo robado. Si hay que cortar por lo sano, se corta! Solo se necesita un hombre y una mujer para volver a empezar.Nuestra democracia está un poco cansada! Gastada! O más bien diría yo "malgastada". A base del abuso de los derechos y olvido de los deberes. Deberes que tanto sudor y sangre les costó a nuestros padres y abuelos. Sí, sangre señores! Como la que seguramente derramó mi abuelo Pepe en el frente de la Guerra Civil. Aunque su versión que siempre nos contó a los nietos era que disparaba "pa arriba" para no herir a nadie. Nosotros ingenuos y crédulos a pies puntillas creíamos en su verdad. Por qué? Porque era el abuelo! Y lo que decía el abuelo iba a misa. Y lo que decía mi padre. Y lo que decían mis tíos o cualquier persona mayor que nosotros. Eso se llama respeto! Y sea o no verdad lo que nos están contando, nuestro deber es creérnoslo y extraer de ahí principios y valores. Ya creceremos para disponer de criterio propio. Pero un criterio con fundamentos. Honrado y honesto para con tus contemporáneos.

Os suelto toda esta parrafada moral porque hace unos meses para mí tocó fondo el tema del respeto en nuestra actual España. No os voy a explicar "historietas" de Urdangarines, Munares, Matas y cia…(me gustan más los comics de Batman, Lovezno, etc… Los de toda la vida, vamos; con moraleja.)

Con la desfachatez con que se han reído de todos nosotros después de robar lo incontable. Algunos como Urdangarín de forma más que retorcida. Pero la falta de respeto que me hizo perder la "fe" fue la famosa peineta del omnipresente Bárcenas. Solo faltaba un subtítulo de mal gusto que esgrimiera algo así como "súbanse aquí y pedaleen los que se ganan el pan honradamente".Y para finalizar, con intención de dejarles con buen sabor de boca y dejando claro que a pesar de lo dicho, mi interpretación de la vida es ver siempre la botella "a rebosar". Soy positivo por miedo. Siempre he temido lo malo, lo negativo. He extraído lo positivo de las circunstancias y he ido poco a poco a base de trabajo, sacrificio y esfuerzo (como se hacen las cosas) formándome una vida feliz.

Recién casado y con todo el futuro por delante. Futuro señores, que me gustaría compartir con todos ustedes de una forma horada y honesta.Pero sobre todo, un futuro que me gustaría compartir con todos ustedes con respeto….

Marino Reguera Martínez
Ferreries

Trofeo Panerai, imagen de Menorca

Querría felicitar al CM Mahón por el éxito de la regata de este año. Soy un habitual de esta regata y la verdad es que es una ocasión única en el calendario en la que el lugar privilegiado hace las delicias de todos los participantes. Sin embargo, no quisiera desaprovechar la ocasión de llamar la atención sobre tres detalles que se han dado en la presente edición, con el propósito de mejorar la organización:1) Es una lástima que cuatro embarcaciones fuesen amarradas lejos del resto en diferentes pantalanes (Cami II, Pas Encore, Cascabel y Margarita Estalindalamar); 2) el presunto error en las instrucciones de navegación que cambio la situación del Calima y del Yanira en la segunda regata de descalificados a posiciones de podio no dio ninguna buena imagen. Es difícil entender que dos embarcaciones que se saltaron la Isla del Aire - mientras que el resto de la flota la rodeó - acabasen en posición de podio en la entrega de premios (creo se debería poner máxima precaución en evitar este tipo de malentendidos que desaniman al resto de participantes) 3) la traducción de los discursos de las autoridades del español al inglés durante la entrega de premios fue del todo insuficiente e imprecisa. Los asistentes de habla castellana no tuvimos ningún problema en entender el acto, pero tengan por seguro que la mayoría de las tripulaciones asistentes se perdieron más de un detalle de lo que se dijo.

Carlos Martí
Es Castell

Caritas es reafirma en el seu compromís

Caritas Diocesana de Menorca es reafirma en el seu compromís d'acompanyar, ajudar i promocionar aquelles persones que, per diferents circumstàncies, es troben en situació d'empobriment, risc d'exclusió social o mancats del drets bàsics i fonamentals que garanteixin el seu desenvolupament humà.També la denúncia de les injustícies i la demanda de solucions reals i efectives forma part de la nostra missió, sempre tenint com a centre la dignitat inalienable de cada home i de cada dona.

En aquesta missió no esteim sols, sinó que treballam amb les administracions públiques i amb altres entitats socials, sempre acompanyats pels nombrosos voluntaris i comptant amb la inestimable col·laboració de moltes persones que, confiant en la bona gestió i serietat de Caritas, ens fan arribar la seva ajuda econòmica.

Malgrat la nostra bona voluntat, no sempre encertam en les decisions preses o en les accions portades a terme. Decisions i accions que, en algun moment poden resultar poc apropiades, o fins i tot ofensives per a algunes persones de les pròpies comunitats cristianes o d'altres àmbits de la societat. Serveixi aquest escrit per demanar-ne perdó amb total sinceritat i humilitat.

Caritas Diocesana de Menorca vol el bé de qualsevol persona, sense tenir en compte el seu origen, sexe, religió, condició social, adscripció política... I per la mateixa raó vol treballar amb aquelles persones i entitats públiques i privades que, tenint en compte els valors de l'Evangeli, contribueixin al bé comú de tota la societat.
Desitjam poder continuar la nostra tasca en nom de l'Església Catòlica de Menorca, comptant com fins ara amb la col·laboració de totes les persones de bona voluntat.

Joan Mir Llorens
Director de Caritas Menorca