Unidos por los retos matemáticos: cerca de 1.600 alumnos menorquines participan en las Pruebas Cangur

Las famosas pruebas tienen como propósito poner en valor la importancia de las matemáticas en el mundo moderno

La gincana matemática celebrada en Ferreries. | IES Biel Martí

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Hay muchos estudiantes que ya saben desde hace tiempo que el tercer jueves de marzo toca, fijo, matemáticas. Y eso es gracias a la fecha es la elegida para las Pruebas Cangur, que desde hace 26 años se celebran en Balears, simultáneamente con otros 90 países del mundo, y que ayer regresaron gracias a la organización de la Societat Balear de Matemàtiques. Cerca de 14.500 estudiantes de las Islas, desde quinto de primaria hasta segundo de Bachillerato, se enfrentaron al reto resolver una batería de problemas adaptada para cada nivel escolar.

Se trata de un popular programa que en Menorca cada vez va a más. Prueba de ello es que la edición de este año ha participado, en diferentes sedes, un centenar más de alumnos que en 2024, situando la cifra en 1.580 estudiantes. Todos ellos tuvieron la posibilidad de enfrentarse al mundo matemático de una manera diferente a la de cada día en las aulas. Y lo hicieron a través retos que requieren una visión mucho más creativa, con gran variedad de temas, e imaginación, además de las habilidades computaciones básicas y el pensamiento lógico.

Imagen tomada en la Sala Multifuncional de Ciutadella, donde se celebró la inauguración institucional de las pruebas a nivel balear. | Josep Bagur Gomila

Las famosas pruebas tienen como propósito poner en valor la importancia de las matemáticas en el mundo moderno y promover una percepción positiva de las mismas en la sociedad». Pero más allá de esos objetivos, las Cangur son también una manera de crear comunidad en torno a la ciencia. Así lo defiende Agustín Carrillo, secretario de Federación Española de Sociedades de Profesores de Matemáticas (Fespm), entidad que hace treinta años acercó el programa a España. «Participar supone afrontar unos problemas que están resolviendo ese mismo día más de cien millones de chicos y chicas en todo el mundo», apunta.

Los cerca de 400 participantes que se citaron en Ciutadella fueron recibidos por autoridades y organizadores. | Josep Bagur Gomila

La inauguración institucional este año se celebró en la Sala Multifuncional de Ciutadella, aunque la actividad se repartió por otros centros de la Isla, como el IES Biel Martí de Ferreries, donde más allá de la prueba sobre el papel se organizó una gincana. «Intentamos que haya una parte de movimiento, más manipulativa; y otra de reto escrito, para que así vean las matemáticas desde diferentes perspectivas», explica Carol Mateo, jefa del departamento de Matemáticas.

Entre las virtudes de las Pruebas Cangur, Mateo destaca la posibilidad que ofrecen a los alumnos de ver la materia escolar «de una forma más divertida, que realmente conecte con su realidad, que tengan la oportunidad de ver las matemáticas no solo como algo que hay que estudiar, sino como algo que te rodea y que aparece en la naturaleza, en los juegos de azar, en cualquier aspecto de la vida».

El apunte

75 minutos de concentración para resolver 30 problemas

Diferentes autoridades se encargaron de dar la bienvenida a los alumnos en la Sala Multifuncional de Ciutadella. Una cita que contó con la secretaria de la Societat Balear de Matemàtiques, Magdalena Martí, quien destacó que las 26 ediciones celebradas en el Archipiélago se han convertido «en una tradición» y reconoció la «satisfacción» que sienten desde la organización por «la alta participación». Tras sus palabras, se hizo el silencio y comenzó un periodo de concentración máxima para intentar superar el reto. Los mayores se enfrentaron a 30 problemas matemáticos durante 75 minutos, mientras que los más pequeños dispusieron de una hora para 24 planteamientos.