El joven cantante menorquín, durante su última actuación en el escenario del programa televisivo de Telecinco | Telecinco

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«La Voz Kids» llegó a su fin y el menorquín Dani Juanico se quedó finalmente a las puertas de la victoria, pero la vida continúa y el sueño de este joven de 13 años, el de dedicarse al mundo de la música, más vivo que nunca. «Ha sido todo un honor participar en un programa como ese. Al final, la experiencia es lo que cuenta, más que ganar o perder», reflexionar el joven artista, que antes de pasar por el concurso de Telecinco ya había actuado con anterioridad en otros programas de IB3 como «La, la, la» y «Petits». De su última experiencia televisiva, que llegó a su final el pasado viernes, Juanico destaca lo bien que se lo ha pasado y, sobre todo, «la oportunidad conocer mucha gente nueva y hacer grandes amistades».

Confiesa que si se deja a un lado lo mucho que ha aprendido gracias a los consejos recibidos por su coach David Bisbal, el Dani Juanico de antes y después del concurso poco ha cambiado en el transcurso de la aventura televisiva. «El mejor consejo que me llevo de mi paso por 'La Voz Kids' es que hay que disfrutar de lo que haces y nada más, y creo que eso me ha ayudado a prosperar».

Su pasión por la música nació cuando tan solo contaba siete años y se incorporó al grupo de góspel de Sa Fabrica de Músics y posteriormente al Coro de Pueri Cantores de la Catedral de Menorca. Pero según su madre, Hortensia Pons, «desde bien pequeño ya se le veía que llevaba el artisteo dentro, y al final lo canalizó a través de la música». Un arte que representa mucho en la vida de este chico. «La música lo es todo para mí, no puedo vivir sin ella. No puedo estar un día sin escuchar una canción, sin cantar o tocar la guitarra», reconoce. Y es que dedicarse a esa rama del mundo del espectáculo es su «plan A», dice. Juanico es consciente de que lo primero es formarse, que es lo que toca ahora, pero confiesa que va a «intentar» triunfar.

De momento, ya sabe lo que es vivir las consecuencias de la fama, que dice llevar bien. «La gente en Menorca cuando me reconoce por la calle me para y me felicita», dice el cantante, quien también ha visto como en muy poco tiempo se ha multiplicado el número de seguidores que tiene a través de las redes sociales.