Condenado a 170 días de trabajo solidario por acoso reiterado a su expareja en Ciutadella

El procesado desarrolló una conducta persistente de acecho, control y hostigamiento hacia la mujer

La sentencia se dictó por conformidad en el Juzgado Penal de Maó. | Gemma Andreu

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El magistrado-juez del Juzgado Penal de Maó ha condenado a un total de 170 días de trabajos en beneficio de la comunidad a un hombre español de 36 años por los delitos continuados de acoso, amenazas, injurias o vejaciones a la que había sido su pareja entre febrero y julio del pasado año.

Según la sentencia, el procesado desarrolló una conducta persistente de acecho, control y hostigamiento hacia la mujer para mantenerse siempre en contacto con ella, pese a que la mujer le había dicho en varias ocasiones que no quería comunicarse con él tras haber roto la relación.

El 30 de junio la amenazó con quemarle el coche y hacer que perdiera su empleo mientras la aguardaba en el lugar donde ella estacionaba el vehículo. El 1 de julio logró entrar en casa de la mujer y de nuevo la amenazó con difundir vídeos de ella de contenido sexual que él tenía grabados.

En días posteriores siguió insistiendo en verla y hablar con ella, pese al bloqueo de su número de teléfono,  utilizando otros números y llamando a una amiga de ella. En otras ocasiones llamaba de madrugada a su portal, de forma insistente y con continuas amenazas.

Orden de protección

La mujer sufrió una situación de tensión, angustia y temor. Finalmente obtuvo una orden de protección respecto a él y el 17 de julio el juez acordó la prisión provisional del acusado hasta que salió en libertad provisional un mes más tarde, aproximadamente.

Ahora ha sido condenado a cinco meses de prisión y a 91 días de trabajo solidario por acoso en el ámbito de la violencia de género, a 69 días más de trabajo en beneficio de la comunidad por amenazas en el mismo ámbito y a 10 días más de las mismas características por el delito de injurias leves, en total 170 días que deberá cumplir para evitar un nuevo ingreso en prisión.

La condena, dictada por conformidad entre abogados y fiscal, lo que supuso que él reconociera los hechos, incorpora la prohibición de comunicarse con ella o aproximarse donde se encuentre a no menos de 100 metros durante dos años.