Un joven de 28 daños de edad ha sido condenado a seis meses de prisión como responsable de un delito de robo con fuerza en establecimiento público, que cometió en la madrugada del 14 de enero del pasado año en el Mercat des Peix, de Maó.
El hombre, de nacionalidad marroquí, no cumplirá la pena de prisión al haber sido suspendida su ejecución en el juicio celebrado el martes, al carecer de antecedentes penales y ser la pena inferior a los dos años de reclusión. Deberá hacer frente a la indemnización que se determine por los daños causados en algunos de los puestos del mercado en los que actuó en busca de dinero o productos allí almacenados.
La sentencia se dictó tras el acuerdo alcanzado entre el fiscal, que le pedía tres años de cárcel, y su abogado.
Los hechos que motivaron su detención días después ocurrieron cuando el joven consiguió entrar en el Mercat del Peix, sito en la plaza Espanya, utilizando una mesa de un bar contiguo. La colocó estratégicamente junto a una esquina del edificio para saltar la fachada y acceder al interior.
Una vez dentro revolvió varios objetos de tres puestos del mercado sin llegar a sustraer ningún producto. En otro puesto logró romper el candado de una vitrina y robó tres botellas de alcohol, al tiempo que arrojaba otras tres botellas de vino al suelo.
Además, según pudo constatar la Policía a través de las imágenes de las cámaras de seguridad, causó desperfectos en un contenedor y en una mesa de madera hecha a medida, valorados ambos en 1.000 euros. Por último, en otro puesto revolvió varios objetos y rompió un armario del que robó 50 euros.
4 comentarios
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La necesidad de especificar la nacionalidad del condenado?
Totalmente de acuerdo con illenca. Las dos últimas semanas día si y día también hay algun robo en algún local de es castell y les da igual.
Y dale con los acuerdos!! Encerrado y punto….Si fuera la casa del fiscal haber si harían trato o no
Pues en Es Castell tenemos un individuo,natural d´es Castell que hace años que roba, en los pocos comercios que quedan,rompe puertas ,cristales ,se pasea impunemente por las noches,asustando a todos los vecinos,lo encierran y al dia siguiente está en la carcel.Es curioso,tenemos una carcel vacía que nos cuesta un dineral, y la gente de Es Castell se siente impotente porque un juez lo suelta.Me sabe mal por los guardias civiles,que hacen su trabajo en vano.Pero está claro que la ley está a favor del delincuente.