Los dos jóvenes de 20 años, residentes en Ferreries, a quienes la Policía Nacional relaciona directamente con la muerte del otro joven mahonés de la misma edad, el pasado día 20 de abril, fabricaban las dosis de MDMA (éxtasis) en su casa tras adquirir las sustancias a través de internet y seguir tutoriales sobre su elaboración.
Ese fue su testimonio ayer en el juzgado de Instrucción número 3 de Maó, más de dos días después de haber sido detenidos por los agentes el sábado en Ferreries, donde ambos residen con sus respectivas familias. Se trata de un español y un marroquí que admitieron disponer de esa droga para su consumo propio, y negaron cualquier relación con el fallecimiento de Gabriel Titos.
El juez, a propuesta de la fiscal, tras oír su declaración en presencia de José de Juan López, abogado de los dos imputados, dictó el auto de prisión al español, eludible bajo fianza de 6.000 euros, acusado de los delitos de tráfico de drogas y homicidio imprudente, y dejó en libertad con medidas cautelares al marroquí, que deberá personarse en el juzgado cada 15 días.
Queda pendiente, como sostuvo el letrado defensor, el análisis de las sustancias que la Policía Nacional intervino en la casa de uno de los detenidos, al tiempo que argumentaba que tampoco estaba probado que hubieran sido ambos los que vendieron las pastillas de MDMA (éxtasis) al grupo de amigos entre el que se encontraba Gabriel Titos. El abogado añadió que no hay prueba concluyente al respecto. El joven falleció el 20 de abril, es decir, un día después de sufrir la parada cardiaca en el puerto de Maó, frente a la Estació Marítima.