Vista del polideportivo municipal, construido en 1979. | Gemma Andreu

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Los servicios técnicos del Ayuntamiento de Maó recalculan el coste de la retirada del amianto en la cubierta del polideportivo municipal y su tratamiento, después de que la licitación de las obras para su sustitución y la posterior instalación de placas fotovoltaicas haya quedado desierta.

La estimación realizada ha sido insuficiente y la obra no ha atraído a ninguna empresa, por lo que deberá repetirse la licitación o bien con un presupuesto superior o bien con una modificación del proyecto que ajuste el precio, para poder abordar la eliminación del amianto con seguridad y de una superficie extensa.

El alcalde Héctor Pons afirmó ayer que se trabaja para volver a sacar la obra a licitación cuanto antes y al mismo tiempo, en la búsqueda de fondos por si el presupuesto base de la licitación debe incrementarse. El proyecto de sustitución de cubierta y ampliación de la instalación solar fotovoltaica del polideportivo de Maó se licitó por 836.699 euros (impuestos incluidos) y un plazo de ejecución de cuatro meses. Cuenta con financiación de fondos europeos canalizados por el Govern balear, además de recursos conveniados con el departamento de Medio Ambiente del Consell y una última parte económica que debe asumir el propio Ayuntamiento.

El plazo para su finalización se prorroga hasta el 24 de noviembre

El plazo para la finalización de la obra y por tanto contar con la financiación europea, que inicialmente terminaba en junio, ha sido prorrogado hasta el 24 de noviembre. Esta ampliación da un respiro al Consistorio ahora que debe repetir la licitación. El concejal de Deportes, Lázaro Alcaide, confía en que la obra pueda realizarse en verano, porque es el momento en el que los clubes reducen su actividad. La reubicación temporal de las cinco entidades principales ya está planificada.