Entre las familias han surgido críticas por esta solución, pues entienden que poco puede calentar un aparato diseñado para caldear pequeñas estancias, pero no aulas enteras. De hecho, aseguran que «los días de más frío se está mejor al sol, en el patio, que dentro de la clase».
Las mismas familias lamentan el «poco interés» y compromiso del Ayuntamiento para con la educación, aún más cuando «la primera idea fue colocar estufas de butano». Una opción que «el propio centro rechazó», apuntan, por el riesgo que supone la combustión a gas en espacios cerrados.
Fue ahí cuando se aportaron calefactores para intentar aumentar la temperatura de las aulas. Sobre este asunto preguntó ayer, en comisión, la concejal de la Entesa, Maite Pons, obteniendo del equipo de gobierno la confirmación de la avería de la calefacción «antes de Navidades», que se suma a los problemas en la biblioteca, «donde la climatización está averiada desde antes del verano», y en el centro sociocultural, añade Pons.
Según el alcalde de Ferreries, Pedro Pons, «antes de fiestas se adjudicó a la empresa Barber Coll» la sustitución de equipos que «estaban al final de su vida útil». Así, «antes de final de mes empezarán por la biblioteca, a principios de febrero lo harán en la escoleta y luego en el centro sociocultural», avanzó.
Parques descuidados
Las familias insisten en el escaso mantenimiento de los parques infantiles del pueblo. Meses atrás denunciaron su mal estado y «desde entonces solo han mejorado el parque de la plaza Constitució, en el resto sigue siendo un peligro para los niños».
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