El bloque de viviendas, situado en la Avinguda Verge del Toro, de Alaior.  | Gemma Andreu

TW
0

Los inquilinos de las 56 viviendas que componen el edificio situado a la entrada de Alaior, entre la Avinguda Verge del Toro y la Carretera Nova, han sido citados a declarar este lunes ante la jueza del Juzgado de Instrucción número 3, de Maó, para que muestren sus contratos de alquiler.

Se trata de la primera convocatoria oficial de estos vecinos en la sede judicial mientras conviven con la intranquilidad por conocer su futuro ante el cambio de titularidad de la finca en favor de la Sareb, una vez se lleve a cabo la subasta. La titular del juzgado debe verificar la validez de estos documentos, a petición del denominado ‘banco malo’ efectuada el pasado septiembre, como último paso para que el proceso que debe concluir en la subasta del edificio pueda llevarse a cabo.

La Sareb pretende conocer los derechos de los inquilinos en este bloque, a partir de esta vista de ocupantes para obtener la información y circunstancias personales de cada uno de los pisos. Ya lo intentó sin éxito hace cuatro meses puesto que la mayoría de los inquilinos se negó a facilitar la información a la firma M&P Ledesma Abogados, con quien la Sareb tiene externalizados servicios de esta naturaleza.

Desde la quiebra de la constructora, Mussola y Bitácora Promociones SL, los inquilinos pagan sus rentas, de entre 400 y 800 euros, a Balearic International Consulting, una empresa intermediaria que arrendó el edificio. El pasado marzo presentaron sus contratos por requerimiento judicial, aunque la primera cita oficial ante el Juzgado se hará mañana, han precisado a este diario.

La Sareb figura como acreedora del préstamo hipotecario que grava los inmuebles, según consta en el Registro de la Propiedad, de ahí que pretenda conocer si existen posibles situaciones de vulnerabilidad de inquilinos antes de que arranque el proceso de la subasta que convertirá al ‘banco malo’ en titular del edificio a todos los efectos.

Los inquilinos, explica uno de ellos, José Antonio Andueza, «vivimos con mucha preocupación la cita ante la juez y el desenlace que tenga este proceso». Al mismo tiempo, no obstante, se muestran esperanzados porque una vez el edificio pase a ser de la Sareb, «suceda lo mismo que ocurrió con dos bloques de Maó que también hizo suyos». Se refiere a que en ese caso de los edificios de las calles Maria Lluïsa Serra yPintor Calbó, sus 53 pisos alquilados fueron subrogados a la Sareb sin ningún perjuicio para los inquilinos.

El apunte

El alcalde Alaior solicitó a la Sareb que garantice la renovación de los contratos

A medida que ha avanzado el proceso del edificio de Alaior desde la quiebra de la constructora, la inquietud de los inquilinos sobre un posible desalojo cuando la Sareb acabe siendo la titular de la finca se ha extendido en el municipio.

El alcalde de Alaior, José Luis Benejam, ya se dirigió el pasado año a la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria, para pedir que garantice la renovación de los contratos de alquiler de todos los inquilinos que residen en este edificio de la Avinguda Verge del Toro.

El primer edil alaiorense contactó con la Sareb para transmitirle que tomara en consideración la falta de vivienda que hay en la Isla y el perjuicio que supondría no renovar estos alquileres, la mayoría de 10 años de duración, con renovación de año en año.