Serpentona, con los viales abiertos pero sin los hoteles. | ARCHIVO SACE

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Desde los años 60 y hasta 1986, la empresa Sistemas Aéreos Comerciales Españoles (SACE) recorrió los cielos de gran parte del país por encargo de sus clientes. El piloto Carlos Rodríguez Escalona, desde un avión Piper PA-18A-135 Super Cub con base en Barcelona, fotografiaba desde el aire las nuevas urbanizaciones, fábricas y zonas industriales que empezaban a desarrollarse por esa época, también en Menorca.

El fruto de esos años de trabajo se ha convertido con el tiempo en un fondo histórico documental de gran valor. El Instituto Cartográfio y Geológico de Catalunya dispone de estos originales, tanto en blanco y negro como en color, y permite su consulta. En los últimos días, el periodista especializado Javier Ortega Figueiral ha compartido en la red social X algunas de las fotografías de esa época en la Isla.

Así es como puede verse una insólita imagen de la incipiente urbanización del Camí de Sa Farola de Ciutadella, con el casco urbano de la ciudad al fondo, y el Hotel Eleycon ya edificado frente a la torre de Sant Nicolau, el que después se llamaría Hotel Esmeralda y hoy es un bloque de  apartamentos turísticos.

Las primeras casas de Sa Farola y el hotel Eleycon. | ARCHIVO SACE

En Cala Galdana también pueden verse los primeros viales de la futura urbanización de Serpentona, pero todavía no había ni rastro de los hoteles que cambiarían por completo la fisonomía de la playa más exuberante de Menorca.

Primer hotel en Sant Tomàs

Donde sí puede verse un primer hotel de playa construido es en la playa de Sant Tomàs, junto a unos chalés que pueden contarse con los dedos de una mano, nada que ver con la realidad urbanística de hoy. Junto a él empezaban a construirse los cimientos del establecimiento que en la actualidad, tras una profunda modernización, es el lujoso Vila Le Blanc.

El primer hotel construido en la playa de Sant Tomàs, el que hoy gestiona la cadena Seth Hotels, y unos pocos chalés al fondo de la urbanización. | ARCHIVO SACE
En primer plano, los viales recién abiertos de la urbanización de Binissafúller, con el poblado de Binibèquer Vell ya construido al fondo. | ARCHIVO SACE

Otra urbanización que empezaba a desarrollarse en esos años era Binissafúller en la costa de Sant Lluís. En este caso, la imagen aérea capta en el fondo la silueta del recién construido poblado de pescadores de Binibèquer Vell, a mediados de la década de los sesenta. Los primeros chalés construidos en las calles recién abiertas eran apenas una veintena.