Buenas previsiones. A pesar de que desde la patronal hotelera apuntan a un descenso del diez por ciento de las reservas respecto al mes de agosto del año pasado, algunos hoteles de la Isla rozan estos días la plena ocupación, y las perspectivas para los próximos meses son buenas | Gemma Andreu

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Empieza el mes de agosto y Menorca se adentra en el clímax de la temporada turística con unas buenas previsiones de ocupación hotelera para las próximas semanas, aunque algunas voces del sector aseguran que las reservas han bajado hasta un diez por ciento respecto al mismo mes del año pasado.

También existe la sensación generalizada de que los turistas españoles este año están fallando, una tendencia que se confirma de cara al mes de agosto, y que se suma a la percepción muy extendida entre las empresas del ámbito vacacional de que la subida de precios está afectando especialmente al turismo nacional.

Leve descenso de las reservas

El presidente de la Asociación Hotelera de Menorca (Ashome), Sebastià Triay, señala que las previsiones para lo que queda de temporada son buenas, aunque peores que las del año pasado a estas alturas, y cifra el descenso de reservas respecto al 2023 en un diez por ciento. Triay también asegura que hay una cierta incertidumbre sobre la marcha final de la temporada por culpa de la tendencia creciente de los visitantes a cancelar las reservas en el último momento. «Ahora el cliente prácticamente no paga nada si cancela una reserva, y muchas veces anulan dos días antes de venir», lamenta.

Desde Ashome también afirman que el turismo español ha experimentado un descenso este año, lo que también se está trasladando a las reservas del mes de agosto. «El turismo nacional subió después de la covid, pero ahora vuelve a bajar», precisa Triay. Asimismo, el presidente de los hoteleros asegura que las últimas manifestaciones en contra de la masificación turística que se han producido en Menorca están desincentivando la llegada de visitantes. «Las manifestaciones contra el turismo están saliendo en la prensa británica, francesa, alemana y española, y esto nos está haciendo mucho daño», señala con enfado.

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También percibe un leve descenso de la ocupación la propietaria de los hoteles Jardí de Ses Bruixes y Son Granot, Anja Sánchez-Rodrigo, que asegura que a partir de la segunda quincena de agosto todavía tiene habitaciones disponibles, cuando el año pasado por estas fechas ya estaba todo lleno. «Es verdad que la gente cada vez reserva más a última hora y que ha crecido mucho la oferta en la Isla, pero no es un agosto como el de otros años, cuando lo teníamos todo lleno», subraya. En este sentido, Sánchez-Rodrigo explica que este año están teniendo que flexibilizar las tarifas y las condiciones para adaptarse a la demanda existente, e incluso están aceptando reservas de dos noches, cuando antes lo mínimo eran tres o cuatro.   

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Menos gasto. Desde el sector hotelero comparten la sensación, muy extendida entre los restauradores y las empresas de actividades complementarias, de que la subida generalizada de los precios del alojamiento y del transporte ha provocado que los visitantes lleguen a la Isla con una menor capacidad de gasto | Gemma Andreu

Plena ocupación

Sin embargo, hay hoteles de la Isla, como el Royal Son Bou, cuyas reservas son similares a las del año pasado y se acercan a la plena ocupación. «Nosotros estamos teniendo una temporada muy buena, que recuerda a la del 2023, y las perspectivas para los próximos meses son excelentes»,   señala el director del establecimiento, Tomeu Janer. También se muestra muy satisfecho por la marcha de la temporada el máximo responsable del Hotel Aguamarina, Fernando Estradé, quien asegura que tienen todas las habitaciones llenas e incluso ya cuentan con reservas para el mes de octubre.     

Viviendas turísticas

También marcha bien la temporada para la Asociación de Empresarios de Viviendas Turísticas de Menorca (Viturme), cuyo presidente, Javier Pons de Marco, explica que en estos momentos las reservas se aproximan al 98 por ciento, y pone de ejemplo el turoperador Villa Plus Menorca, que de 219 viviendas, esta semana tiene reservadas 217. «A efectos de viviendas turísticas, la noticia sería que durante el mes agosto no estuvieran llenas», enfatiza Pons de Marco, quien añade que las perspectivas para septiembre no son tan buenas, puesto que todavía hay mucha disponibilidad. «El problema en Menorca es que la temporada es muy corta, y prácticamente solo tenemos julio y agosto», remarca.

El turismo rural consolida su buen momento en la Isla y presenta una elevada ocupación | R.L.

Las buenas sensaciones de Viturme corroboran los datos de un estudio realizado por Rentalia, la plataforma vacacional de Idealista, que señalan que la vivienda turística en Menorca presenta una de las mejores ocupaciones de los destinos turísticos de costa de España para agosto, solo superado por Mallorca.

Desde Viturme también consideran que las expectativas al inicio de la temporada en algunos sectores eran demasiado altas, y por ello muchas empresas turísticas se están quejando de que su facturación ha bajado. Asimismo, señalan que el debate sobre la masificación turística puede estar provocando que algunas personas desistan de venir a la Isla.

El apunte

Agroturismos y hoteles rurales rozan el lleno, pero baja la rentabilidad

Los hoteles rurales y los agroturismos de Menorca vuelven a presentar una ocupación muy elevada, y en la mayoría de casos ya han colgado el cartel de completo para este mes de agosto.   

Es el caso del Agroturismo Son Vives, en Ferreries, cuya ocupación para los próximos dos meses, como ya les ocurrió en julio, roza el cien por cien. Además, también tienen llena la primera quincena de octubre. Por todo ello, no dudan en calificar la temporada de muy buena.

Más costes y menos consumo

También rozan la plena ocupación en el Hotel Rural Biniarroca,   aunque en este caso han notado el descenso del turismo nacional.  «Las perspectivas de cara a agosto son buenas, aunque se nota una bajada del turismo español, que en nuestro caso hemos podido suplir con otras nacionalidades», explica la directora del establecimiento, Núria Sintes. «También prevemos que este año bajará la rentabilidad, porque los costes han subido mucho, y la gente consume menos, especialmente en cuanto a servicios complementarios», añade.