Trasmed ignora la solución del fondeo y atraca de nuevo en Maó

Este es el segundo fin de semana que el barco de Grimaldi Trasmed pasa en los muelles del puerto de Maó pese a que las mediciones acústicas realizadas dieron la razón a los vecinos y confirmaron que el ruido generado por el buque supera, en horario nocturno, los límites establecidos en el Real Decreto 1367/2007, de 19 de octubre, por el que se desarrolla la Ley 37/2003 de 17 de noviembre, del ruido, en lo referente a zonificación acústica, objetivos de calidad y emisiones acústicas.

Si bien la noche del 2 al 3 de junio fondeó en la bocana, la naviera alegó que esa solución era puntual y se mostró reticente a hacerlo de manera regular. El pasado fin de semana del 8 y 9 de junio optó por atracar y realizar sus propias sonometrías, aunque los vecinos denunciaron que lo hizo con alguno de sus motores inactivo y las luces, salvo las de señalización imprescindibles, apagadas, con lo que dudaron de que el resultado de los informes sea el de la contaminación acústica real. Una semana después el ‘Ciudad de Granada' ha vuelto a amarrar en el puerto haciendo caso omiso de las medidas que se le recomendaron mientras busca soluciones al exceso de ruido, para lo que cuenta con el plazo de un mes desde la última reunión de los vecinos con responsables de Autoridad Portuaria de Balears, el 4 de junio.

Es decir, el 4 de julio es la fecha marcada para que la compañía ponga sobre la mesa una solución, pero hasta entonces, tal y como informó el Consell a Gonçal Seguí, presidente del colectivo vecina, el compromiso era que el barco de Grimaldi Trasmed fondeara fuera del puerto, en la bocana, todas las noches de los sábados.