En el cruce de Son Vivó se restringe el paso cuando se llena el parking de Son Saura. | Josep Bagur Gomila

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Tras unas primeras semanas de colapsos en los aparcamientos y los caminos de acceso a las playas vírgenes, especialmente del sur de Ciutadella, empiezan hoy su labor un total de veinticinco informadores, para controlar la llegada de vehículos a cinco playas: Cala en Turqueta, Son Saura, Macarella y La Vall, y también Binimel·là en Es Mercadal.

Los informadores y los paneles luminosos de las rondas norte y sur de Ciutadella estarán operativos hasta el 4 de octubre.

Magí Moll, el responsable de Eco Verd, la empresa de la Fundació de Persones amb Discapacitat Illa de Menorca contratada para realizar esta labor, señalaba ayer que este será el segundo año de prórroga previsto por la adjudicación y que el dispositivo es idéntico al del año pasado, con veintitrés controladores y dos coordinadores de servicio.

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Por fases

La primera fase del servicio empieza hoy. El horario de los controladores es de 8 a 18 horas, para los accesos a las calas del sur de Ciutadella y La Vall. En el caso de Son Saura, dos informadores empiezan la jornada en el parking de la playa y cuando esté a punto de completarse el aforo, uno de ellos se dirigirá al cruce de Son Vivó, para instar a dar media vuelta a los conductores. Lo mismo harán las dos personas que estarán en el aparcamiento de Macarella al empezar la jornada, y uno de ellos se desplazará hasta la intersección de Sant Joan de Missa, para evitar el acceso de más vehículos. No obstante, esto será solo hasta el 31 de mayo, puesto que a partir del 1 de junio solo se podrá llegar a Macarella en bus y los informadores tendrán como misión cerrar el tráfico que pretenda llegar a la playa.

En cuanto a Binimel·là, el servicio es distinto. Igual como en años anteriores, los controladores únicamente están en el parking de 8.30 a 10.30 horas, para ordenar los primeros vehículos y evitar la pérdida de espacio por estacionamientos incorrectos. Luego, el resto de usuarios siguen el orden lógico sin que sea necesaria la presencia del personal.

La otra playa menorquina que cuenta con controladores es Cala Pilar. En este caso, el servicio se implanta entre el 1 de julio y el 30 de septiembre, con un horario distinto, de las 9 de la mañana a las 6 horas de la tarde.

Referido al apoyo que el Consell ha reclamado a la Guardia Civil, para que, como único cuerpo competente, ayude a controlar el acceso de coches a las playas, desde la concesionaria indican que aún no tienen noticias.

El apunte

El Consell avanzará el servicio de controladores el año que viene

El conseller de Movilidad, Manuel Delgado, aseguró ayer que su departamento ya está trabajando en la renovación del convenio para el servicio de informadores y controladores en los accesos a las playas del sur de la Isla, que actualmente presta la Fundació per a Persones amb Discapacitat y que el año que viene se deberá volver a licitar, después de dos años de prórroga. En este sentido, Delgado ya avanzó que su voluntad es que la próxima temporada la puesta en marcha del servicio se avance quince días, hasta el 1 de mayo. De esta manera, desde el Consell pretenden dar solución a los problemas que se han detectado este año en las vías de acceso a playas como Cala en Turqueta o Macarella, y que han provocado las quejas de las fincas de la zona. Delgado también afirmó que se trabaja para mejorar la coordinación con la Policía Local de Ciutadella y la Guardia Civil.