Como cada año, el cementerio de Maó volvió a acoger este domingo el acto convocado por Esquerra Unida de Menorca, para conmemorar la proclamación de la Segunda República el 14 de abril de 1931.
Acto de homenaje a la Segunda República en Maó
El acto contó con la presencia de cargos públicos de las formaciones de izquierda
También en Menorca
- Air Nostrum cancela cuatro vuelos de la ruta de Menorca con Palma
- Que esta furgoneta destartalada no se encuentre en...
- El juez de Granada deja en libertad provisional a la madre detenida por dejar morir a su bebé en Maó
- El Ministerio dedica tres millones de euros para rehabilitar el castillo de Santa Àgueda
- Dimite la concejal de Servicios Sociales y Juventud de Ferreries
17 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
... como de costumbre, sólo aparecen vertiendo su bilis los opinadores filoderechistas del medio del obispado de referencia en la isla... por mi parte, no voy a defender el derecho a la libre expresión de las personas afines a la República, a manifestarse y montar reconocimientos públicos, porque es tan obvio que huelga recalcarlo... y lo van a seguir haciendo siempre que quieran, pese a algunos les parezca lo que les parezca...
MazingerDisculpa, le he dado al rojo por error. Tienes mi me gusta y si pudiera te daría mil.
Siempre serán Subcampeones
Realista¿A on vas aprendre a argumentar? ¿Als cursets "Como ser buen español" de la Falange? No entenc com els redactors del Menorca t'ho han deixat pasar.
Quien mejor define la República son sus tres padres espirituales: Ortega y Gasset, Gregorio Marañón y Pérez de Ayala. Ortega empezó enseguida a decir “¡no es eso, no es eso! Pérez de Ayala tiene frases como esta: “cuanto se diga de los desalmados mentecatos que engendraron y luego nutrieron a sus pechos nuestra gran tragedia”, se refiere a los republicanos, “todo me parecerá poco. Lo que nunca pude concebir es que hubieran sido capaces de tanto crimen, cobardía y bajeza”. Gregorio Marañón dice “mi amor a la verdad me obliga a reconocer que la República ha sido un fracaso trágico, tendremos que estar maldiciendo varios años la estupidez y la canallería de estos cretinos criminales y no habremos acabado, ¿cómo poner peros, aunque los haya, a los del otro lado?” Podemos ir al socialista Besteiro, que dijo que los nacionales habían librado a España de aquella pesadilla. Podemos recurrir a Azaña que, en sus diarios, está constantemente hablando de los republicanos, a quienes trata de “botarates”, de “gente ligera, sentimental y de poca chaveta”, habla de “una política tabernaria e incompetente de amigachos, de codicia y botín sin ninguna idea alta”. Cuando uno ve esto se queda asombrado de que ahora se lancen enormes loas a la República como si fuera un régimen idílico, una maravilla. No lo fue en absoluto
musica en un cementerio? pero esto que es! ya de paso que hagan un botellon irrespetuosos, ni muerto puede uno descansar de esta panda
Salvo por exhibir un deseo vivo de que se acabe con el régimen monárquico, me cuesta entender que se idolatre todavía hoy al régimen de la segunda república. En primer lugar porque antes de esa segunda república hubo una primera; y en segundo lugar porque dejando aparte el folklorismo de la bandera tricolor… Y algunas medidas ciertamente “progresistas” como el sufragio femenino, las reformas agrarias y educativas y alguna otra mas ciertamente innovadora y positiva (que por desgracia apenas si tuvieron tiempo de aplicarse), la inestabilidad fue su característica mas marcada. Creo que todavía somos víctimas de un injustificado y supersticioso complejo consistente en esconder tras estos actos de exaltación a la república, el rechazo a las “malas costumbres” de los siglos XIX y XX de pronunciamientos y golpes de estado -y sobre todo- a la (oportunista) usurpación y represión franquista. ¿Por qué no lo reconocemos abiertamente así y dejamos de idealizar un periodo de nuestra historia que no tiene tantos méritos (sobre todo en sus últimos años)?. En eso seríamos muchos mas los que estaríamos de acuerdo.
Claro que sí! Vivan los asesinos de curas y monjas indefensos; los pirómanos de conventos e iglesias; los pistoleros de mayo del 37 en Barcelona; los chekistas; los comisarios políticos y los agentes estalinistas. No podemos dejar que nos vendan un relato irreal como si fuera historia. Menorca fue un infierno rojo durante la guerra y los asesinos portaban esa bandera.
Esta celebración me hace pensar que es cierto que necesitamos memoria histórica democrática. Si la hubiera no existiría.
Vaya gandalla de ociosos rencorosos y fanatizados. Arriba España!!!