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El Día Internacional de la Mujer se ha vivido en Menorca con dos manifestaciones, en Ciutadella y en Maó, además de varias concentraciones y actos diversos en distintos municipios. Todo, con el objetivo de reivindicar el fin de las desigualdades y las injusticias con las mujeres, por el mero hecho de serlo.

En Ciutadella, la concentración ha sido por la tarde y ha estado convocada por CGT Menorca, Pensionistes de Ciutadella per la seva Dignitat, Transverxia y el Comitè Solidaritat Menorca Palestina. Iniciaron el recorrido algo más de un centenar de personas, en la Plaça de ses Palmeres, y poco a poco se fueron sumando más, hasta alcanzar alrededor de 300 personas a la altura de Es Born. Un poco antes, la manifestación se ha detenido en la Plaça de la Catedral, para entonar todas juntas, una versión adaptada de «Donna donna» de Joan Baez, y otra de «La lega», la canción revolucionaria italiana.

Al grito de «feminismo es igualdad» o «abajo el patriarcado, se va a caer; arriba el feminismo, que va a vencer», la movilización ha continuado hasta la Plaça des Pins, donde se han ido sucediendo actuaciones musicales y lecturas de manifiestos, y siguieron los cánticos en contra del patriarcado y sus abusos. «Si nos tocan a una, nos tocan a todas», «No soy Siri, búscate la vida», «Con ropa o sin ropa, mi cuerpo no se toca».

Participaron Mendó Fem Renou, integrantes de CGT, Maria Galetta, Evazumbafit, Laia G. y Ceci Fernández, Dancehall Menorca, Sonia y Atreidas, y Mama Fiera y Pluma.s.

La manifestación en Ciutadella, a su llegada a la plaça dels Pins | Katerina Pu

Manifiestos

En medio de la fiesta musical, las entidades han leído distintos manifiestos. Desde la Confederación General del Trabajo (CGT) y, bajo el lema «Se ha acabado la desigualdad, juntas transformamos realidades», reivindicaron este «día de unidad y resistencia» para «alzar la voz contra las injusticias del sistema cisheteropatriarcal, del capitalismo voraz y de las violencias machistas». Un sistema, denunciaron, que «no reconoce las curas como trabajo y que las relega al ámbito doméstico», lo cual    acaba por «denigrar el trabajo reproductivo frente al productivo». Por eso, «nos negamos a la sumisión, a la invisibilidad, a la precariedad y al silencio».

Es así que «decimos basta», exclaman en su exposición, para exigir el fin de la precarización de un trabajo muy feminizado, en el cual es necesario avanzar para lograr condiciones dignas, convenios colectivos y contratos justos, derechos laborales y acceso a la huelga tanto para internas, como externas.

Entre las exigencias que ha enumerado la CGT, figuraban la eliminación de la división sexual del trabajo y la precarización de sectores feminizados; acabar con la brecha salarial y en las pensiones; erradicar desviaciones de género en la salud laboral; eliminar machismos y micromachismos; luchar contra las políticas de ultraderecha que limitan derechos consolidados; derogar la reforma laboral y la ley mordaza. Igualmente, reclamaron rebajar la jornada laboral a 30 horas, o eliminar la ley de extranjería y apostar por la regularización, entre otras demandas.

El Comitè Solidaritat Menorca Palestina se ha hecho eco del manifiesto de Queers Palestina, denunciando las tácticas coloniales patriarcales, que ejercen una «brutalidad espectacular y de masacre sobre los cuerpos palestinos, incluyendo violaciones, torturas y mutilaciones». Eso, en un marco de genocidio por parte del Estado de Israel, ante lo cual reclamaron el apoyo activista queer y feminista, en este caso, de Menorca.

Por parte de los Pensionistas de Ciutadella, Maria Lluïsa Armangué, nacida en 1932, ha recordado épocas pasadas de «mucha retención feminista que venía de lejos» y señaló el camino, en cuanto a lo que todavía queda por conseguir para alcanzar la plenitud de derechos para las mujeres.

El Comitè Solidaritat Menorca Palestina se hizo eco del manifiesto de Queers Palestina, denunciando las tácticas coloniales patriarcales, que ejercen una «brutalidad espectacular y de masacre sobre los cuerpos palestinos, incluyendo violaciones, torturas y mutilaciones». Eso, en un marco de genocidio por parte del Estado de Israel, ante lo cual reclamaron el apoyo activista queer y feminista, en este caso, de Menorca.

Por parte de los Pensionistas de Ciutadella, Maria Lluïsa Armangué, nacida en 1932, recordó épocas pasadas de «mucha retención feminista que venía de lejos» y señaló el camino, en cuanto a lo que todavía queda por conseguir para alcanzar la plenitud de derechos para las mujeres.

Maó

Dones Autoorganitzades ha convocado la manifestación de Maó que ha recorrido de la Explanada a la Plaça del Carme y en la que han participado unas 250 personas. En esta ocasión, el manifiesto recogió las palabras de la escritora nigeriana Chimamanda Ngozi Adichie, convertidas en quince «sugerencias» sobre cómo educar en el feminismo. Por ejemplo, propone «hacerlo conjuntamente», es decir, que la propia mujer, madre, no propicie ella misma una reducción de responsabilidades del padre; o enseñar que los roles no llevan nombre de hombre o de mujer; defender el feminismo, basado en la «igualdad plena» entre géneros y sin pensar que los hombres son «superiores por naturaleza, pero deben ‘tratar bien' a las mujeres». O enseñar a los hijos a cuestionar el lenguaje, «porque es depositario de nuestros prejuicios, creencias, presunciones»; nunca hablar «del matrimonio como un logro», ya que sugiere un «desequilibrio terrible»; o enseñar que hay que «rechazar la obligación de gustar», sino que se debe buscar «realizarse plenamente».

En Maó, la manifestación ha terminado el recorrido en la Plaça del Carme | Gemma Andreu

Esta manifestación ha seguido a la concentración que, por la mañana, han convocado, por un lado, el Ayuntamiento de Maó, y por otro, Comisiones Obreras y UGT.

En la Casa Consistorial, la corporación municipal al completo ha consensuado un texto, que incidía en que restan aún «muchas desigualdades sistémicas» por erradicar, ante lo cual se esbozaron una serie de compromisos. Para implementar políticas que promuevan la igualdad en todos los ámbitos. A la vez, instaron a las entidades locales a que adopten medidas para lograr la paridad, acabar con la brecha salarial, promover el entorno seguro o garantizar la representación equitativa de las mujeres.

Mientras, los sindicatos, frente a la Dirección Insular del Estado han recordado los últimos avances en materia de igualdad, pero lamentaron que queda mucho camino por recorrer. «Es prioritario» continuar en la lucha, con los planes de igualdad, subiendo el Salario Mínimo Interprofesional, mejorar las políticas de ocupación destinadas a determinados grupos de mujeres, adoptar políticas con perspectiva de género o apostar por la coeducación. Ayer, también el Consell se sumó a los actos del 8M, con la lectura de un manifiesto para reclamar y potenciar los derechos fundamentales de las mujeres.