El Consell anunció este jueves una inversión de diez millones de euros para sacar adelante los proyectos que el Govern rechazó financiar con el último reparto de la recaudación del Impuesto de Turismo Sostenible, la ecotasa. La institución insular trata así de aliviar, asumiendo gran parte de la inversión con propios fondos, el chasco que supuso el feo del Ejecutivo balear al trabajo de coordinación realizado desde Menorca, el llamado pacto por el agua, para priorizar las actuaciones necesarias en materia de recursos hídricos y presentarlas como un único proyecto insular fruto del consenso.
El sonoro portazo del Govern, competente en materia de Recursos Hídricos, provocó un gran malestar entre los alcaldes de la Isla, que habían trabajado para elaborar nueve proyectos que sumaban 17 millones de euros. Solo uno de ellos, presentado en nombre del Consell, relativo a la eterna mejora del tratamiento terciario en la depuradora Maó-Es Castell para reaprovechar las aguas residuales, fue aprobado, con una inversión de 2,4 millones de euros. Ha hecho falta más de una década de reivindicaciones para lograrlo.
La reacción del Consell, acordada en el seno del equipo de gobierno y con los consistorios, ha sido comprometerse con los ayuntamientos a asumir el mayor esfuerzo inversor que se recuerda en materia de recursos hídricos. La inversión fue pactada ayer en la reunión de la Comisión de Corporaciones Locales de Menorca, que, sin embargo, no pudo consensuar la manera en que se repartirán los cinco primeros millones del año 2023.
La intención del Consell es compensar en primer lugar a aquellos ayuntamientos que en los últimos repartos de la ecotasa han visto frustrados sus proyectos. La de los ayuntamientos, tener fondos para poder ejecutar proyectos completos. Existen dudas de cómo hacer confluir esos cinco millones del Consell para 2023 con los 2,3 millones que el Govern ha comprometido para arreglar fugas en las redes de distribución y con los 400.000 que se destinarán a ejecutar de los planes municipales de gestión sostenible del agua.
La presidenta del Consell, Susana Mora, defendía este jueves que tras la negativa del Govern «tuvimos muy clara la necesidad de incorporar una partida a los presupuestos de 2023 para seguir avanzando con la mejora de la gestión del agua, para solucionar los problemas de abastecimiento que se puedan presentar». Por su parte, el conseller de Medio Ambiente, Josep Juaneda, subrayó la «clara apuesta por mejorar la gestión del agua, con visión insular y de la mano de todos los municipios, con el objetivo de encarar un futuro cada vez más difícil a causa del cambio climático, en el que será clave la eficiencia y aprovechamiento de todos los recursos disponibles».
El apunte
Un proyecto por pueblo a la espera de ver cómo se repartirán los fondos
6 comentarios
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El des Milá sigue aferrado al cómodo y bien remunerado sillon?
Sumando a tod@s los de las mesas no hacemos ni uno bueno. Llevamos pagando agua potable sin poder usarla. Tiempo de elecciones y ahora hay que aparentar que se preocupan por el pueblo
¿Será ahora el momento de tener agua potable en todo Maó o habrá que esperar todavia mas?
En la foto se les ve muy sonrientes... los hay que aún no han presentado la dimisión por la pésima gestión de "Milà"
A ver, como siempre el Govern nos ningunea, en eso no hay ninguna noticia. Lo que me deja perpleja son los proyectos que se querían pagar con la ecotasa. Y no que los proyectos no me parezcan bien. En mi opinión, tener una red de agua, alcantarillas y depuradoras en buen estado, es una tarea de manutención común. Ampliarlas y añadir por ejemplo sistemas de recogida de pluviales para satisfacer las necesidades debidas a la población flotante sí que podrían ir a cargo de la ecotasa, no sé si me explico... Ayuntamientos y Consell deberían tener unos presupuestos para cumplir con sus tareas de obra y mantenimiento de los servicios básicos para los menorquines, con la ecotasa paliar los efectos negativos de la llegada de visitantes y consiguientes consumo de recursos y generación de residuos...
Bona Feina.