Un profesional sanitario recibe la vacuna en el hospital Mateu Orfila | Gemma Andreu

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El jefe del servicio de Farmacia del hospital Mateu Orfila de Menorca, Ignacio Blasco, ve difícil alcanzar el 70% de personas vacunadas en Menorca antes del inicio de la temporada turística.

«La inmunidad de grupo se consigue con un mínimo del 70% de las personas vacunadas. Hay dos caminos, la vacunación o pasar la enfermedad con el riesgo que comporta y que algunos se queden por el camino. Veo justo llegar a principios de temporada turística con un alto porcentaje de los menorquines vacunados», ha señalado a Efe.

Blasco ha explicado que la rapidez con la que se ha encontrado una vacuna contra la enfermedad es proporcional al grado de necesidad.

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«Es cierto que todo ha ido muy rápido, pero se ha acelerado voluntariamente por la necesidad de encontrar un antídoto que frene la propagación. La vacuna ha pasado por todas las fases, hay cientos de miles inyectadas por todo el mundo y no se ha notificado problema alguno. Es absolutamente segura», ha indicado.

Según el responsable de Farmacia del Mateu Orfila, los síntomas más comunes tras la vacunación son dolor local en el brazo y malestar general.

El médico ha calificado de «barbaridad» el movimiento antivacunas.

«Intento no leer afirmaciones como que la vacuna no servirá para nada, el daño que supone para el cuerpo o que conlleva importantes efectos adversos. El movimiento antivacuna es una barbaridad y en el caso de esta es segura y necesaria para toda la población», ha reivindicado.