Una calle de la urbanización de calzada estrecha, sin aceras y con obstáculos. | Josep Bagur Gomila

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El Ayuntamiento de Sant Lluís invertirá 4.764.829 euros en los trabajos de urbanización de Binisafúller Roters, que adolece desde sus inicios de infraestructura y servicios básicos. Ese es el presupuesto, IVA incluido, que figura en el proyecto actualizado por el ingeniero Ramón Ulldemolins sobre el anterior de Joan Moll, aprobado inicialmente en 2001 y que nunca fue ejecutado.

La modificación de las Normas Subsidiarias desde entonces así como la legislación urbanística, los nuevos criterios del viario público, ahorro energético, contaminación lumínica, las propuestas vecinales y hasta los precios han requerido un proyecto adaptado a las nuevas exigencias de hoy.

Se trata de dotar este núcleo de la vialidad e infraestructura de la que carece o ha tenido en condiciones precarias. Comprende el abastecimiento de agua a cargo del Ayuntamiento, que tiene en trámite el proyecto de perforación, electrificación, elevación y canalización del agua potable a la urbanización.

La red de pluviales será conducida directamente al mar dadas las características de la urbanización en pendiente hacia la costa. A su vez, los vertidos de las parcelas a la red de saneamiento se realizará por gravedad, lo que supone incrementar la profundidad de las calles Xaloc y Botànic en algunos tramos a más de cuatro metros. Las aguas sucias serán conducidas a la estación de bombeo existente en el límite de la urbanización.

El proyecto incluye también las redes de media y baja tensión y el alumbrado público, que será uniforme en toda la urbanización con luminarias de led empotradas para evitar la contaminación lumínica, según se ha acordado entre el Ayuntamiento y los vecinos.

Está previsto asimismo la canalización subterránea de las telecomunicaciones y el acondicionamiento de los espacios públicos, en particular las calles, la mayoría de las cuales contará por fin con aceras.