En el II Foro Menorca Nedgia que se celebró este martes en el IES Josep Maria Quadrado de Ciutadella, con más de cien asistentes, se evidenció un avance en el uso del gas como energía de transición hacia un modelo sostenible, con un 100 % de procedencia renovable. El mejor ejemplo es Baleària. Su jefe de flota, Guillermo Alomar, explicó que uno de los dos nuevos barcos que se propulsarán con gas, se destinará a una de las rutas con Ciutadella. Será a principios de 2019.
Otro campo en el que se avanza es el biogas. Óscar Bartomeu, gerente de Biovec, explicó la capacidad que tendría Menorca para la producción de biogás a partir de los purines animales y el suero lácteo (xerigot), entre otros residuos. Nuria Rodríguez también apuntó que una de las líneas de la empresa es incorporar este combustible a la red de distribución.
La CEO de Nedgia abrió el abanico de posibilidades, además del suministro doméstico y a empresas. Los coches, camiones y autobuses que ya pueden utilizar el gas es uno de los sectores en los que más se puede crecer. Y puso un ejemplo, un coche particular con 20 euros puede recorrer 275 kilómetres si es de gasolina, 375 con gasoil y 555 con gas. Indicó que hay empresas de transporte de pasajeros de Menorca «seriamente interesadas» en incorporar el gas.
El director general de Energía y Cambio Climático Joan Groizard fue muy descriptivo sobre los riesgos y las oportunidades. Siempre con el objetivo de cumplir en 2050 con el cien por cien de procedencia renovable, destacó el apoyo al gas natural como energía de transición. Y volvió a insistir en el objetivo de que la central térmica del puerto de Maó utilice el gas como una forma importante de reducir las emisiones contaminantes.
El Foro de este martes contó con la presencia de representantes empresariales de un gran abanico de sectores, interesados por las ventajas que representa el gas.
Entre las autoridades, la consellera Maria Cabrisas, la senadora Juana Francis Pons Vila, la concejala Marta Marqués, los alcaldes Misericordia Sugrañes y Pere Moll y el presidente del Cercle d'Economia, Francisco Tutzó.
