MAHON. SERVICIOS SOCIALES. Usuario 1.000 del Servicio de Teleasistencia domiciliaria

El usuario dispone de una unidad de control remoto para activar el terminal

Mercè Pons15/09/14 0:00
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El Servicio de Teleasistencia Domiciliaria se adecuará a las necesidades actuales de los mayores. El dispositivo incluirá un sistema moderno para que las personas con problemas auditivos puedan pedir ayuda a través de estos terminales de apoyo social. Ésta es una de las novedades que se tendrá en cuenta a la hora de adjudicar el servicio, actualmente en fase de licitación.

El Consell se ha visto abocado a sacar a concurso el contrato para la gestión de la teleasistencia después de que la Federación Nacional de Municipios y Provincias (FEMP), que cofinanciaba el servicio, anunciara a finales de 2012 que no prorrogaría más el convenio, suscrito en 2006. El cambio principal de esta circunstancia es la supresión de la ayuda económica que el Ejecutivo insular recibía. De ahí que deba asumir la totalidad del coste del servicio.

No obstante, el pliego de condiciones que rige el concurso no incluye modificaciones en las tarifas, según señalan desde el Consell, por lo que «el usuario no va a notar ningún cambio al respecto».

Este acuerdo en el que intervenía la FEMP y el IMSERSO, suponía que el Consell aportaba tan solo una parte de la cuantía total del servicio. Ahora, deberá asumir los 300.000 euros anuales. El estudio económico y financiero elaborado por el Consell estima que el coste total del servicio asciende, para cuatro años, a unos 1,2 millones de euros. De estos, los usuarios aportan 74.700 euros. Es así como el Consell ha licitado el servicio por un presupuesto base de 1,2 millones de euros (sin IVA) y las previsiones son que el contrato esté adjudicado a finales de año. Tras el anuncio de la FEMP de no prorrogar el servicio, el Consell rubricó un convenio con la empresa para el mantenimiento y la continuidad en la prestación del servicio que concluirá una vez se haya adjudicado la prestación.

Este servicio social que lleva ofreciendo el Consell desde el 2002 superó en 2013 los 1.400 usuarios. Estos datos suponen un incremento en seis años de un 43,1 por ciento, cuando en 2008 el servicio no alcanzaba aún los mil terminales.