El renovado y remozado CP Sa Graduada de Maó abrió ayer sus puertas para unos 300 alumnos tras un año de obras. La novedad y la ilusión de poder estrenar un centro cargado de historia pero dotado de modernidad y adaptado a las necesidades educativas actuales quedó ayer empañado por una «grave» deficiencia derivada de la reforma. Con las obras, han desaparecido las persianas que hasta el momento protegían las aulas del sol. Y esta supresión no ha ido acompañada de la instalación de cortinas o 'stores' que hagan la misma función que las persianas.
El reestreno de Sa Graduada
Unos 300 alumnos regresan a las clases de la reformada escuela de Maó, tras un año en el colegio Maria Lluïsa Serra
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2 comentarios
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sa lluita d'uns pares tossuts haurà valgut la pena
I una vegada més sa Conselleria la "pifiada" una nova escola sense cortines, on es fillets més petits fan pipí a vistes de sa gent des J.M.Cuadrado i sense fer net es pati on sa pols d'obra ho omple tot. I sense classe de psicomotrocitat, i amb averia a sa font per estrenar.......Molt bé sa inauguració politica , però ni cas en es mestres i direcció de sa escola.