Al repasar los diferentes presupuestos de las comunidades autónomas, uno se va reafirmando en aquella sensación que tuvo al comienzo de la legislatura actual, por lo que a Comunidades Autónomas se refiere.
Ya que a medida que avanza la misma, dichos entes se vuelven cada vez más voraces y se ven incapaces de controlar el gasto, que ellos mismos han ido incrementando y como quieren sacar pecho de lo muy bien que lo hacen se dedican a despojar a sus súbditos de lo que van recogiendo con su trabajo y sudor, sin el mínimo pudor echan mano de los impuestos para desvalijarles; tal como hacían nuestros antepasados los señores feudales. Y como pasa siempre, nunca son los culpables de nada siempre es el otro, sea Madrid, sea Palma o de Menorca; y a los pobres no les queda más remedio que aumentar los impuestos.
Lo más dramático lo podemos ver en dos comunidades autónomas que curiosamente alardean públicamente de que lo hacen muy bien y «el malo es el otro», Por lo que respecta al impuesto sobre el patrimonio Cataluña va a recaudar 90 por ciento más de lo que recaudó en el ejercicio 2013 y Baleares nada menos que un 50 por ciento más que en el año anterior. Menos mal que nos prometieron sobre todo a los isleños que iban a bajar los impuestos y que así reactivarían la economía porque ellos eran de corte liberal y no creían en la intervención pública, y que dejarían a los mercados actuar. Pues vaya, solamente en los dos años que llevan gobernando han subido el impuesto sobre transmisiones, han introducido el céntimo sanitario en los carburantes teniendo en estos momentos la gasolina más cara del territorio nacional, como no podía ser de otra manera introducen el canon sobre el consumo del agua porque por muy mal que se pongan las cosas, uno tiene que seguir consumiendo el preciado liquido ya que somos humanos, sin olvidarnos del impuesto sobre el bingo, en los Ayuntamientos han subido hasta el último año el IBI y las plusvalías municipales en cuanto se produce un cambio de nombre de unos terrenos ya sea vía compraventa, donación o sucesión. Y a todo ello uno se pregunta ¿para qué tienen que cobrar de un bien que ya se ha pagado el impuesto correspondiente cuando lo hemos adquirido?
También nos habían dicho que reducirían la administración en su estructura y que la harían más eficaz, y resulta que después nos vamos corriendo al Senado para que modifiquen la Ley y que nos dejen colocar a nuestros FLAMANTE DIRECTORES GENERALES y que por supuesto no sea necesario que hayan demostrado su valía en unas oposiciones, sino que podamos elegir a NUESTROS AMIGUETES y así tener contentos a los afiliados al partido que este gobernando en el momento. Si nos fijamos en la postura de los diferentes partidos han estado de acuerdo en esta ultima actuación, ¿ será que ya se ven colocados en alguna de estas preciadas sillas vacías de contenido y llenas de sueldos? Si bien no quiero hacer hincapié en ello pues en otros artículos el abajo firmante ya ha expresado cual es su opinión al respecto.
2 después viene el ministro Montoro y nos da un tirón de orejas diciéndonos que no cumplimos con los objetivos de déficit, pero ¿cómo vamos a cumplir si no hacemos más que gastar el dinero en cosas inútiles? Y eso sí, cada gobernante que se precie tiene que dejar para las posteridad su particular obra faraónica, para que cada vez que pasemos junto a ella le recordemos y pensemos para adentro ¿ por qué tuviste que salir elegido y hacer esto? ¿ o en nombre de una «Reserva» dictar resoluciones sin ser conscientes de lo que puede pasar e hipotecar a las generaciones futuras?
Cabría recordar a nuestros representantes que algún día los tribunales podrían declarar nulos los impuestos confiscatorios, como ya se han pronunciado recientemente en aquel caso que un noble quiso hacer valer un impuesto feudal al pretender cobrar un porcentaje del valor de la trasmisión de unos terrenos que en su día fueron propiedad de su MARQUESADO, y no hace tanto en la anterior legislatura declaraba inconstitucional una subida de retenciones del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas.
Dios nos coja confesados de que siga adelante la reforma que tiene en mente el Gobierno central de conceder mayor poder normativo a las comunidades autónomas para poder crear nuevos impuestos, puesto que parece ser, que Madrid tiene decidido no aumentar las trasferencias a las autonomías y les dice que si quieren más dinero que se los pidan a sus contribuyentes. Pero sin apenas capacidad normativa hacen lo que hacen ¿qué serán capaces de hacer si les das el BOE para legislar? ¿ Seremos capaces de soportarlo los sufridos contribuyentes?
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