El caso Cesgarden pone en serio riesgo el plan de urbanizaciones

La consellera de Turismo, Salomé Cabrera, puso en duda ayer de que los presupuestos de 2014 puedan incluir una partida para este fin. Y aunque no aseguró al cien por cien la supresión del plan, advirtió de que "lo más fácil en estos momentos es pensar que no podremos habilitar la partida para el ejercicio de 2014". El plan está en grave peligro.

Cabrera avanzó que el Consell está buscando vías para poder disponer de la cuantía, no obstante fue clara al argumentar que "entre la sentencia de Cesgarden y otras cuestiones de financiación que vendrán sobrevenidas, el Consell deberá recortar el presupuesto", con una afectación importante para aquellas partidas extraordinarias, es decir, las que no tienen que ver con el funcionamiento ordinario del Ejecutivo. El presidente del Consell, Santiago Tadeo, garantizó hace tan solo unos meses un nuevo plan turístico de cara a 2014. No obstante, Salomé Cabrera, recordó que ésta había sido siempre la voluntad del Consell, antes de conocer la dura sentencia de Cesgarden. Aseveró estar "muy indignada" con esta losa que pesa sobre todos los menorquines y que va a suponer un revés importante para los ayuntamientos."Una mala gestión política que hipoteca el futuro de Menorca", concluyó. Cabe recordar que el Consell dotó el plan de mejoras de las zonas turísticas con 2 millones de euros.

En un sentido similar se expresó ayer la consellera de Servicios Generales, Trabajo e Innovación, Pilar Pons, quien recordó que la indemnizació «condiciona gravamente el futuro económico de esta administración durante los próximos diez años». Rechaza las críticas de los partidos de la oposición, ya que no comparte que sea hacer uso político explicar a la ciudadanía las consecuencias de la sentencia, al tiempo que considera infundada la posibilidad no explotada, planteada por el PSOE, de llevar el caso al Tribunal de Estrasburgo. Es más, Pons lamenta que «aún no hayan pedido disculpas públicamente».
La consellera informa que está trabajando en los presupuestos de 2014, con la intención de que el caso Cesgarden tenga el menor impacto posible en los servicios que se prestan a la ciudadanía.