Agua. Maó espera la llegada del agua desalada desde Ciutadella, aunque podría tener su propia desaladora, según el Govern balear - Paco Sturla

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El Plan Hidrológico de Balears contempla como una de las infraestructuras a construir en los próximos años la tubería que permita hacer llegar el agua desalada hasta el núcleo urbano de Maó. Así figura en el apartado de interconexiones de infraestructuras, que sin embargo pospone esta actuación hasta la segunda fase del plan, es decir, que podría no ser una realidad hasta el año 2021.

La construcción de esta conducción está presupuestada en 20 millones de euros. Esta infraestructura debería permitir, por un lado, que la planta desaladora de Ciutadella funcione a pleno rendimiento, lo que ayudaría a disminuir el coste del agua producida. Por otro lado, debe ayudar a solucionar los problemas de salinización y de nitratos existente en el agua potable que ahora se suministra a los hogares del levante de Menorca. De hecho, Consell, Govern balear y Gobierno central caminan en esta dirección, una vez descartado que la desaladora tenga que funcionar únicamente para abastecer a los consumidores de Ciutadella.

Ahora bien, a pesar de contemplar esta conexión a nivel insular, el Plan Hidrológico no descarta otras propuestas para mejorar la calidad del agua en la zona de levante de la Isla. Así, en la Memoria del Plan, se habla de construir una planta desaladora para la zona de Maó. El Govern incluye esta medida entre el posible abanico de actuaciones para mejorar la calidad del acuífero con el que se alimenta esta zona de la Isla.

El Ejecutivo autonómico apunta que "existe una contaminación por intrusión marina en el acuífero mioceno debido a las extracciones de agua para abastecimiento, especialmente en Sant Lluís. Asimismo, existe una contaminación por exceso de nitratos debido a la presencia de numerosas granjas, especialmente de ganado bovino, y en menor medida por la utilización de fertilizantes para la agricultura y por la presencia de pozos negros".

Ante este diagnóstico, el Plan propone unas medidas como clausurar los pozos más cercanos a la costa, redistribuyéndolos hacia el interior. Se apuesta también por cementar el fondo de los pozos más profundos, tratar los residuos ganaderos, regular las dosis de fertilizantes en la agricultura, sustituir los pozos negros por fosas sépticas homologadas en las viviendas aisladas y también utilizar las aguas depuradas de la EDAR Maó-Es Castell para el riego.

En caso de que todas estas medidas no funcionen, el Govern apunta que "en las sucesivas revisiones del Plan Hidrológico se valorará la necesidad de instalar una planta desaladora de agua de mar para la zona de Maó". No es la primera vez que se habla de esta posibilidad, pero el debate parecía haberse aparcado totalmente desde el momento en que se apostó por la canalización hasta el levante de la Isla del agua desalada en Ciutadella. El Plan Hidrológico aprobado por el Ejecutivo de José Ramón Bauzá ha vuelto a poner esta posibilidad sobre la mesa.

Tubería hasta Es Caragolí

El plan de actuaciones concretas del Plan Hidrológico incluye una segunda inversión en materia de interconexión de infraestructuras. Así, se presupuesta en cinco millones de euros la conducción del agua desalada hasta los depósitos municipales de Es Caragolí, propiedad del Ayuntamiento de Ciutadella.

Esta actuación, sorprendemente no incluida en el proyecto inicial de la desaladora, es básica para que la planta pueda suministrar agua al núcleo urbano de Ciutadella. Cabe recordar, en este sentido, que durante una época el Consistorio ciutadellenc se opuso tajantemente a la ejecución de esta actuación, alegando que hasta no saber el precio del agua no estaba dispuesto a que el caudal de la desaladora llegara a sus depósitos. Finalmente, la infraestructura se construiría, aunque el debate sobre el precio del agua aún no está resuelto.

Estas dos actuaciones, de todos modos, dependen de un hecho para el cual aún no hay fecha. Las conducciones no podrán transportar agua si la planta no funciona, y a día de hoy no se sabe cuándo va a suceder esto. El Plan asegura que la puesta en funcionamiento de esta infraestructura está prevista para antes del año 2015.