"Menorca con su riqueza puede optar a un turismo alemán de clase media alta"

Acompañado el cónsul honorario de este país en Menorca, Matthias Roters, el diplomático se reunió con el presidente insular, Santiago Tadeo y los consellers de Movilidad y Proyectos, y Turismo, Luís Alejandre y Salomé Cabrera respectivamente. Sobre la mesa abordaron temas como la situación económica y turística de la Isla, y en concreto la promoción que lleva a cabo la Fundació Destí en el mercado germano.

Silberberg, señaló que el sello Menorca Reserva de la Biosfera es un atractivo a exportar en el mercado teutón y que existen sectores de la población alemana de clase media alta hacia los que se pueden dirigir estrategias de promoción turística con el objetivo de que visiten la Isla, de la que destacó su seguridad y tranquilidad.

Poco después, Silberberg mantuvo un breve encuentro con el director Insular de la Administración del Estado en Menorca, Javier López-Cerón, en el que el embajador se interesó por los "problemas" que causa el colectivo alemán en la Isla. "Prácticamente ninguno", respondió el director insular. El diplomático, que lleva a cabo una visita relámpago a las islas (el martes estuvo en Mallorca y hoy estará en Eivissa), también tuvo tiempo para conocer de primera mano la labor de recuperación del patrimonio histórico, cultural y militar que la Fundación Hospital de la Isla del Rey lleva a cabo en este histórico enclave del puerto de Maó.

El embajador visitó asimismo, el cementerio inglés, el Teatre Principal, y el órgano y las ocho campanas de Santa María donadas por el matrimonio alemán formado por la artista María Herrmbrodt Fechhelm y el catedrático emérito de la Universidad de Colonia, Irwin Scollar. Silberberg es embajador en España desde 2009, país del que confiesa estar enamorado, está casado con una gallega y es padre de cuatro hijos.

Creo que ha tenido hoy una apretada agenda en Menorca ¿Qué le ha parecido lo que ha visto?
Es mi primera visita. Hace un año acordé este viaje con el cónsul. Me habló del patrimonio cultural de Menorca, de su riqueza natural y, realmente, he quedado sorprendido maravillosamente.

¿Cuál es el motivo de su visita?
Seria extraño que un embajador alemán no visitara las Islas. Hay que tener en cuenta que solamente en Mallorca este verano se espera la llegada de cuatro millones de alemanes. En Menorca también hay turismo alemán, aunque no es tanto.

Menorca tiene sol y playa, tiene naturaleza, pero los alemanes se van más a Mallorca.
Bueno, pero Menorca con su riqueza natural puede optar por otro turismo alemán de clase media alta que busca algo más que sol y playa. Esta Isla tiene un patrimonio cultural interesante. Ese turismo busca gastronomía y cultura. He hablado con el presidente insular para fortalecer este tipo de turismo.

¿En Alemania se conoce Menorca?
Ciertamente es menos conocida. Mallorca tiene en Alemania hasta un nombre propio que es "Malder" y eso no lo tiene Menorca.

¿La Isla necesita promocionarse más?
Sí. Tenemos que buscar áreas en las que trabajar juntos, para hacer más atractiva la Isla. He visitado la Isla del Rey y me parece fantástica, también tiene vínculos con Alemania. Allí estuvo el regimiento de Hannover bajo la bandera británica y una calle de Maó se llama Hannover. Hay vínculos por explotar.

¿Menorca es un sitio para que los alemanes inviertan?
Sí, creo que tiene un gran potencial turístico e industrial. Hay que tener en cuenta que la población alemana está envejeciendo y éste es un nuevo turismo. Creo que hay que combinar los temas de salud y ocio para la gente mayor.

¿España es ahora un país de oportunidades para los alemanes?
Decididamente sí. Los inversores extranjeros están regresando y también la industria. Algunas empresas alemanas están invirtiendo activamente en España. Hace pocas semanas asistí a la inauguración de una fábrica de una multinacional alemana relacionada con el sector químico en Sagunto que representa una inversión de 40 millones de euros.

¿Qué imagen tienen los alemanes de los españoles después de la crisis?
La imagen de España sigue siendo positiva. Hay que entender que muchos alemanes pasan su vacaciones en España, sus mejores días del año. También hay empresas españolas que tienen mucho éxito en Alemania relacionadas con la moda, la telefonía, la banca. La imagen de los alemanes en España según los sondeos también siguen siendo positiva, pero no se puede negar que la crisis económica y financiera tiene sus efectos, pero estoy seguro que estos serán temporales.

Uno de esos efectos es la mala imagen que tiene Ángela Merkel, por su obsesión con el déficit como objetivo económico en Europa ¿No cree que esa obsesión impide a países como España recuperarse más rápidamente de la crisis?
Ese es un gran mal entendido. Quien exige una política de consolidación a España no es Alemania. El año pasado la prima de riesgo en España subió a niveles insostenibles, eso no lo causó Europa ni Berlín, fueron los mercados financieros. Hubo especulación, pero también hubo falta de confianza y de credibilidad en España.

¿No es Alemania quien impone esta política?
No. Antes ha hablado de la falta de solidaridad de Alemania, pero el Parlamento Federal ha aprobado con mayorías aplastantes paquetes de rescate en favor de Grecia, Portugal, Irlanda, Chipre y al sector bancario español. Hasta ahora, las garantías que se han dado suman 300.000 millones de euros. Cuando se habla de solidaridad en la zona euro hay que ser conscientes de que hay países pobres como Estonia o Eslovenia que también son solidarios con países que están en dificultades como España.

España agradece esta solidaridad pero la salida de la crisis se ralentiza ¿Cuándo Europa y en particular Alemania, incentivará las políticas de estímulo económico que piden países como España o incluso Francia?
No es tan fácil. Si quieres crear trabajo a corto plazo, el método es invertir en obra pública, pero España tiene hoy día unas infraestructuras más modernas que Alemania, no necesita más Aeropuertos, más hospitales, ni más autopistas, o más centros de cultura... En Alemania tuvimos que hacer recortes muy duros hace 10 años, recortamos los presupuestos en Defensa, en la Administración Pública y en Sanidad, pero los incrementamos en Educación y en I+D. Ambos garantizan los puestos de trabajo en el futuro y creo que se debería hacer también en España. Igualmente es fundamentar apoyar más la pequeña y mediana empresa, pero hay un problema de crédito.

Claro, las empresas españolas se financian a un coste superior que el de las alemanas. Esto es una dificultad añadida.
Sí, por eso hay tres áreas en las que ya se trabaja en Europa. Ahora se negocian los presupuestos del marco financiero entre 2014-2020. En ellos hay 6.000 millones de euros para luchar contra le paro juvenil. Alemania quiere que ese dinero se gaste antes del 2015 porque el problema del paro lo tenemos ahora. También se ha incrementado el capital del Banco Europeo de Inversión para que facilite crédito a tasas más bajas en un volumen de 60.000 millones de euros a países europeos.

¿A eso se suma la ayuda que Alemania concederá a las pequeña y medianas empresas españolas?
Si, pero este es un acuerdo bilateral que estamos negociando. Es un programa entre un banco público alemán y el ICO dotado con mil millones de euros a intereses más bajos que los que se pagan ahora en España para apoyar a la Pequeña y Mediana Empresa, pero también para reducir el paro juvenil. Igualmente estamos en contacto con las grandes aseguradoras alemanas y fondos de inversión para aumentar esta aportación alemana.

¿Todo esto también estaría sumado a los minijobs como solución?
En Alemania los minijobs nunca han sido una solución. Cuando se hizo la reforma laboral en Alemania teníamos cinco millones de parados, muchos de ellos de larga duración. Un método para reincorporarlos poco a poco al mercado de trabajo fueron los minijobs. Hoy día, el 90 por ciento de los trabajos en Alemania son indefinidos y el salario es según el convenio colectivo. El minijob no es la regla, es la excepción. Muchos estudiantes hacen uso de ellos. El paro juvenil en Alemania es del 7,8 por ciento, un elemento decisivo es la formación profesional dual con gran prestigio y muy unida a las necesidades de las empresas.

Y muchos jóvenes españoles formados se están marchando a Alemania.
El año pasado unos 29.000 españoles se fueron a Alemania. Inmigrantes que buscan trabajo solo unos 14.000. La diferencia es que ahora son personas altamente cualificados; ingenieros, médicos, enfermeras y especialistas en comunicación. Desafortunadamente, en Alemania se habla alemán y sin el conocimiento de la lengua es imposible encontrar trabajo. También hay españoles en puestos directivos en Alemania que también vienen a España.

¿Entonces una forma de que se queden los españoles en España sería invertir en educación y en I+D?
Francamente creo que un español después de vivir su quinto invierno en Alemania lo único en que pensará siempre será en regresar a su país (sonríe).