La Guardia Civil activa un plan para evitar nuevos incendios

El director insular de la Administración del Estado en Menorca, Antoni Juaneda, explica que "se trata más de un dispositivo de persuasión que no de prevención". En este sentido, apunta que uno de los elementos de este dispositivo es el patrullaje de puntos de todos los municipios de la Isla, en colaboración con la Policía Local. El objetivo es reducir el campo de acción del posible autor de los incendios mediante un dispositivo insular coordinado y dirigido por la Guardia Civil.
Mientras este plan intenta parar al presunto causante de los fuegos, la investigación sigue avanzando "de forma muy exhaustiva", apunta Antoni Juaneda. Se trabaja con varias pistas, indicios, informaciones, se cuenta con la colaboración de los expertos desplazados a la Isla para investigar los fuegos, pero a día de hoy, concluye Juaneda, "no tenemos ningún nombre ni ningún colectivo sospechoso".

En este sentido, Juaneda desmiente los rumores que han circulado estos días y que hablan de un extrabajador del IBANAT como principal sospechoso. Otras fuentes oficiales consultadas hablan también de la necesaria cautela a la hora de señalar culpables en un tema tan sensible y que ha afectado tanto a la sociedad.

Así, el director insular del Estado niega también que el domingo fuera detenida una persona, tal como llegó a decirse en Es Mercadal. Los rumores hablaban incluso del presunto 'modus operandi' de la persona presuntamente detenida, y de su vinculación con Menorca. "No se ha detenido a nadie, ni tampoco es cierto que se buscara un coche blanco", sentencia Juaneda.

Sobre el vehículo, este periódico ha podido saber que el día de los incendios de Son Parc y la Costa Nova se realizaron varias inspecciones a diferentes automóviles en búsqueda de pistas que pudieran conducir hasta algún sospechoso.

Con todo esto sobre la mesa, y con la política comunicativa centrada en priorizar la investigación antes que la difusión de la información para evitar interferencias, Juaneda sí admite que, tal como explicaba ayer este periódico, el cerco sobre el presunto autor se está estrechando "y que se está intensificando la operación abierta desde que se registraron los incendios".

Colaboración desinteresada

Los cuatro incendios de la pasada semana han dado lugar a pequeñas historias de solidaridad y de colaboración. El incendio de Son Parc es el escenario de dos de ellas. Al enterarse de la existencia del fuego, uno de los empresarios de la urbanización, Manuel Campanero, se puso en contacto telefónico con el alcalde de Es Mercadal para poner a la disposición de las personas que trabajaban en la extinción del fuego el supermercado de la urbanización.

De esta manera, y según han explicado algunos trabajadores de este establecimiento, desde el viernes y hasta el domingo, se suministraron refrescos y bocadillos a bomberos, personal del IBANAT y otras personas que trabajaban en la extinción de las llamas y el control para que no volvieran a quemar.

Algo similar sucedió con un establecimiento hotelero de la urbanización, el Sol Parc. En este caso, abrió sus puertas también a las personas que extinguían los incendios para que pudieran comer o bien para que pudieran asearse durante las muchas horas que trabajaron contra las llamas.

"Estamos encantados de poder colaborar en una cosa así, esas personas trabajaron muchas horas para apagar el fuego", comenta un responsable del establecimiento.

Y es que durante estos tristes episodios, además de la solidaridad y el respeto de los menorquines hacia todas aquellas personas que han trabajado para evitar males mayores, la sociedad insular ha demostrado tener un aprecio hacia su territorio fuera de lo común.

Algún cargo público lo explica incluso emocionado, asegurando que esta demostración de menorquinidad y de amor hacia la Isla es de lo poco bueno que se puede destacar de estos cuatro incendios que aún están siendo investigados.