La Universitat Internacional de Menorca Illa del Rei (UIMIR) se presenta este año en un nuevo formato. El rediseño de la plataforma académica que durante años ha sido un referente del septiembre mahonés, deja de concentrarse en una semana para ofrecer una formación permanente a lo largo de este segundo semestre del año.
Cinco son los cursos que el comité académico ha aprobado para su celebración y que se impartirán escalonados desde julio a noviembre. Tienen como temática "los verdaderos problemas y preocupaciones de los ciudadanos", según anunció ayer el director de la UIMIR, Antoni Petrus, quien resaltó que "la formación en tiempos de crisis debe ser prioritaria y ésta debe tenerse en cuenta a la hora de elaborar las propuestas programáticas de los cursos".
Así, la educación y las nuevas tecnología forman un tándem aunque también se ofertan talleres sobre custodia agraria del territorio, retos energéticos, turismo náutico o enogastronómico, entre otros. Estos talleres formativos se impartirán en la sede del IME y la Casa de Ses Aigües, aunque la organización no cierra las puertas a otras dependencias. Los interesados ya pueden consultar esta oferta académica en laweb www.uimir.cime.es .
El objetivo de esta "reformulación", según el concejal de Educación del Ayuntamiento de Maó, Simón Gornés, es "recuperar el éxito académico conseguido en anteriores ediciones". Cabe recordar la tendencia a la baja que sufrió el programa hasta el punto de suspenderse o quedar reducido a una edición testimonial, como ocurrió el año pasado con la organización de tan solo tres cursos.
Los talleres se han organizado en periodos de cuatro o cinco días o de fin de semana con la intención de abaratar el coste de la estancia de los inscritos foráneos así como de los profesores que también percibirán una menor retribución.
Además, algunos cursos combinan, como novedad, el formato presencial con el virtual.
Así es como el presupuesto reservado este año para la iniciativa asciende a unos 63.000 euros. Esta cuantía es inferior a las ediciones pasadas. Y es que, tal y como recuerda Gornés, el presupuesto marcado el año pasado rozaba los 120.000 euros, aunque finalmente solo se gastaron unos 30.000 euros al impartirse menos cursos de los previstos. Este nuevo diseño también afectará a las matrículas que se mueven en una horquilla de entre 30 y 100 euros, cuando en años anteriores la media era de 120 euros.
Además, este año la edición ha sido organizada pensando, no solo en alumnos universitarios, sino en un perfil de público que tradicionalmente asiste a los cursos, es decir matriculados de entre 35 y 50 años de edad que no cursan carrera y que buscan formarse y adquirir conocimientos. Según Petrus, "iniciamos a su vez un ámbito de trabajo que une el mundo de la pequeña y mediana empresa con el 'business school' de la UOC" para ofrecer formación a medida de las necesidades empresariales.
Gornés recordó a su vez que los cursos se impartirán siempre que consigan un mínimo de quince matriculados.
Por otra parte, y tal y como avanzó Petrus, la UB ha expresado su voluntad de colaborar de nuevo con la UIMIR, aunque está aun pendiente de la rúbrica del convenio.
Con esta reincorporación, la UIMIR contará con el aval académico de la UIB, la UOC y la UB.
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