El Ayuntamiento de Alaior fue escenario ayer de dos concentraciones en protesta por el despido de cinco trabajadores municipales; cuatro policías locales y un inspector de obra. La primera tuvo lugar a las dos de la tarde y concentró a unos sesenta trabajadores. La segunda, la más sonora, se inició dos horas más tarde y reunió mayoritariamente a policías entre los que había una nutrida representación de las plantillas de policías locales de toda la Isla. Alaior disparó ayer el conflicto laboral en este sector.
Los agentes se concentraron en apoyo de los compañeros despedidos, aprovechando que el Ayuntamiento acogía a esa misma hora una reunión del Consejo de Coordinación de las Policías Locales de Menorca a la que asistió el conseller de Administraciones Públicas del Govern, el menorquín Simón Gornés.
A su llegada, acompañado de la directora general de Interior, Emergencias y Justicia, Maribel Ferrer, los policías hicieron sonar los silbatos y bocinas que portaban, al mismo tiempo desplegaron varias pancartas con la leyenda "Esto no es una zapatería, es un cuerpo de Policía" y "Negociación, igual a imposición, PP igual a prepotencia".
Gornés se detuvo para atender a los concentrados y el delegado sindical de CCOO, Francisco Guerrero, le hizo llegar el malestar de los agentes por los compañeros despedidos "Se ha abierto la caja de Pandora de los recortes y la presencia de la Policía en la calle es muy importante", dijo.
El conseller respondió que trasladaría su queja a la alcaldesa de Alaior, Misericordia Sugrañes, al tiempo que resaltó que el Govern no tenía nada que ver con esta situación. "Nosotros hemos hecho un gran esfuerzo para mantener el presupuesto de la policía turística" cifrado este año en 3,2 millones de euros, señaló el conseller.
No descartan la huelga
Para los sindicatos, los recortes laborales aplicados por el Ayuntamiento de Alaior son el inicio de otros que sospechan comenzarán a aplicarse en otros municipios y no descartan inicial acciones más contundentes como la huelga. Menorca cuenta actualmente con algo más de 200 agentes locales, y cerca del 25 por ciento tiene contrato de interino. Los sindicatos ven ahora amenazados estos puestos de trabajo. De hecho, el próximo día 20 de diciembre todos los representantes sindicales celebrarán un encuentro para unificar criterios.
"Esto es una guerra abierta. Nosotros no tenemos que pagar ahora la mala gestión de estos años", espetó Andrés Fernández, coordinador de la Federación de Servicios a la Ciudad de CCOO y asesor en la mesa de negociación que aprobó por unanimidad el nuevo plan de ordenación del personal del Ayuntamiento de Alaior. "No pararemos hasta que no vuelvan a contratar a los compañeros despedidos de forma tan perversa", añadió.
Fernández denunció que los despidos deberían haber sido negociados a pesar de la firma del acuerdo con los sindicatos. La decepción era palpable ayer entre los trabajadores y es que a pesar de haber cedido prestaciones y derechos laborales para evitar despidos, estos se han producido apenas unas horas más tarde de que el pleno ratificara el acuerdo.
Limpieza encubierta
El responsable de la Federación de Servicio Público de UGT, Llorenç Valls, llegó a insinuar incluso que estas rescisiones de contrato podría estar dirigidas más hacia una "limpieza de personal no deseado" que a un ahorro económico. De hecho, criticó duramente que el equipo de gobierno no haya cuantificado aún cuál será el ahorro de estos despidos.
"El pleno discutió sobre la presencia de animales salvajes en los circos, nosotros lo que tenemos claro es que el circo en este Ayuntamiento lo tendremos todo el año", comentó, al tiempo que reprochó a los socialistas y al PSM de Alaior haberse abstenido en el pleno que votó el acuerdo.
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