Inauguración. Alberto Coll y el alcalde de Ciutadella - D.M.

Inauguración. Alberto Coll y el alcalde de Ciutadella - D.M.

Redacción MenorcaCiutadella26/11/11 0:00
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Una de las bodegas vinícolas de mayor reputación en Uruguay lleva el nombre Salort. Era el apellido de María Josefa, hija de Jaume Salort Bagur, nacido en 1870 en Ciutadella y que emigró al país latinoamericano a finales del siglo XIX. Los descendientes son ahora propietarios del grupo Traversa que exporta los mejores caldos a todo el mundo. La odisea que vivió este emigrante de Ciutadella la experimentaron otros pioneros como Bernardí Pons Mora (empresario vinícola), Bartomeu Triay (industrial), o las sagas de los Canet de Ciutadella en Argentina o la saga Juanico en Uruguay, entre otros muchos.

La historia de estos emprendedores fue detallada por Gabriel Julià Seguí en la ponencia "Ramas de un mismo tronco. Menorca en América", que ayer dio inicio a las XI Jornades de Recerca Històrica de Menorca, organizadas por la Societat Històrico-Arqueològica Martí i Bella sobre las grandes migraciones modernas de menorquines.

El ponente repasó las causas que motivaron en la primera mitad del siglo XIX el éxodo de los menorquines: la falta de trabajo y el temor de los jóvenes a ser enviados a tierras lejanas por el servicio militar. Fueron las causas por las que muchos jóvenes abandonaran la isla nativa para encontrar fortuna en América Latina, especialmente en Argentina y Uruguay. "Menorca hizo su aportación y aquellos pioneros dieron lustre a los linajes en campos tan diversos como las letras, la música, el derecho, la política, la industria o la Iglesia", afirmó. Gabriel Julià destacó "la verdadera fijación" de estos emprendedores: la formación y educación de sus hijos. "Esta tozudez en hacer estudiar a los vástagos tuvo consecuencias importantísimas en la esfera social: los menorquines consiguieron significación en la evolución de los países que los recibieron".

Tras la ponencia, Miquel Àngel Marquès y Carolina Moreno Torres ofrecieron sendas comunicaciones. Alberto Coll, presidente de la SHAMB, destacó el esfuerzo para alcanzar esta undécima edición de las jornadas, un ciclo histórico cuyo nivel académico peligra de cara al año que viene debido a la incertidumbre de las ayudas económicas.