Ángeles Martín ObispoMaó06/08/11 0:00
TW
0

Proyecto Hombre pretende trabajar en la nueva cárcel de Maó e implicar a los reclusos drogodependientes en sus programas de rehabilitación y reinserción. Responsables de la entidad en Menorca tienen previsto reunirse la próxima con la subdirectora de tratamiento del centro penitenciario para exponer su propuesta. La iniciativa es la misma que Proyecto Hombre ya desarrolla desde hace años en las cárceles de Mallorca y de Eivissa.

Según explica el responsable de la entidad en Menorca, Enric Mas, estadísticamente el 80 por ciento de la población reclusa en España tiene problemas de dependencia, suelen ser toxicómanos y sus delitos están relacionados en muchas ocasiones con el tráfico de estupefacientes. Y aunque no todos los internos dan el paso de participar en los distintos programas de Proyecto Hombre, la entidad pone a su alcance la posibilidad de seguir tratamientos de rehabilitación, reinserción e integración social. El centro menorquín tiene una capacidad para acoger 210 internos y en septiembre comenzarán a llegar los primeros reclusos. A partir de entonces, los dos terapeutas especializados en drogodependencias de Proyectos Hombre, en colaboración con el equipo de terapeutas de la prisión, podrían comenzar a trabajar.

Buscar la raíz del problema
En un principio, Proyecto Hombre pondrá a disposición de los internos todos sus programas; tratamientos de autoayuda y talleres donde habitualmente se trabaja aspectos como la motivación, la concienciación y la disminución del riesgo de contagio del VIH. "Es importante que la persona se dé cuenta de que en la raíz de todos sus problemas está su adicción a las drogas", explica Mas. Estos tratamientos pueden ser intrapenitenciarios y extrapenitenciarios en la unidad terapéutica de Palma. Incluso, los internos en situación de tercer grado podrían realizar un tratamiento ambulatorio.

Ayuda a las familias
Enric Mas precisa que cada caso debe ajustarse a propio reglamento penitenciario, es decir, los terapeutas de la prisión deben valorar antes la situación de cada preso. También destaca que Proyecto Hombre pondrá a disposición de las familias de los reclusos que así lo deseen talleres donde aprender a abordar el problema al que se enfrentan. Por historia y por praxis, desde el inicio de Proyecto Hombre en Balears hace ya 22 años, la entidad siempre ha estado presente en las prisiones y Menorca será ahora el nuevo reto de esta entidad sin ánimo de lucro.