Oyentes. Águeda Reynés junto a Simón Gornés en un pleno de Maó - Archivo

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El PP de Maó ha acogido con preocupación la noticia sobre la subvención de la Conselleria de Comercio, Industria y Energía que no ha ingresado el Ayuntamiento por un retraso en la justificación de las facturas de las obras de la Plaça del Carme. La respuesta del alcalde, Vicenç Tur, sobre el acuerdo para cobrar la ayuda pendiente, que asciende a 290.000 euros, no ha sido satisfactoria para el presidente de la junta local del PP, Simón Gornés, quien considera este hecho "un claro exponente de cuál es la forma de gestión del actual equipo de gobierno formado por PSOE, PSM y EM".

Gornés preguntó ayer, a través de una nota de prensa, si el propio alcalde o la teniente de alcalde de Servicios Generales "ya que no participa en los próximos comicios", se responsabilizarán del posible incremento del coste financiero que haya podido tener el retraso en el cobro de la subvención de 290.000 euros. Además, el dirigente del PP de Maó se pregunta si ocurrirá lo mismo cuando un ciudadano incumpla los plazos fijados por la Administración, aunque sea por su responsabilidad, y si "se podrá dirigir al Ayuntamiento y asegurar verbalmente que tiene el problema resuelto y que la administración cobrará, y por tanto aquí paz y después gloria, sin que se ponga en marcha toda la maquinaria administrativa y sancionadora municipal".

Gornés interroga asimismo al gobierno de izquierdas sobre qué ocurrirá si, a pesar de las garantías verbales de la Conselleria, no se cobra la subvención a la remodelación de la Plaça del Carme. "¿Cómo piensan afrontar el señor Tur y sus socios ese importante desfase presupuestario?", pregunta el presidente del PP de Maó en el comunicado, al tiempo que plantea dudas sobre si el incumplimiento del plazo de pago a proveedores habrá repercutido en los costes municipales, con la obligación del Ayuntamiento de pagar costes o intereses de demora. Gornés concluye que "ésta es la verdadera fórmula de gestionar" de Tur, "incrementando costes de forma continuada y repercutiendo en los ciudadanos las consecuencias de su desafortunada gestión económica y administrativa".

El PP promete, si gana la Alcaldía, gestionar de manera "racional", con una contención del gasto corriente que posibilite congelar la presión fiscal y mantener los servicios.